Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !

Actualizado: 24 de junio de 2025


En un grupo donde estaban muchos empleados, algunas señoras y D. Custodio se hablaba de una comision enviada á la India para hacer ciertos estudios sobre los calzados de los soldados. ¿Y quiénes la forman? preguntaba una señora mayor. Un coronel, dos oficiales y el sobrino de S. E. ¿Cuatro? preguntó un empleado: ¡vaya una comision! ¿y si se dividen las opiniones? ¿Son competentes al menos?

Baudelaire es el autontimoroúmenos por excelencia, el rigor de las desdichas, el que se castiga y atormenta a propio como el más cruel de los fakires de la India.

Entrar en una casa de juego, pasión culminante de la india, y allí la veréis sin contraérsele un músculo de su cara, y sin pronunciar una palabra mal sonante su lengua, perder su último dinero, y pasar de la riqueza á la indigencia como si tal cosa.

Por su gigantesca estatura descollaba sobre los demás hombres. Ágil y fornido, los dominaba y acaudillaba. En su desesperación, no sabiendo a qué arbitrio recurrir, los tripulantes decidieron volver atrás con diferente rumbo, o para ver si hallaban alguna tierra en que remediarse, o para ver si lograban aportar al Japón o volver a la China o a la India.

Angustias, india tarasca de raza pura, era maestra en el difícil arte de cuidar y entretener a los niños. Durante varios años sirvió en mi familia, prodigando sus cuidados, sucesivamente, a los cinco hermanos que éramos.

Tuyú en lengua india significa bárbaro, que es el suelo de aquel pais, continuando así, hácia el medio dia, hasta cerca de 10 leguas de las primeras montañas.

Nosotros no tenemos nada. »Cuba es una tumba muy grande que guarda un cadáver más grande que ella: la raza india muerta. »Esa raza me alienta, y la máxima de Bolívar me conforta: ¡Venceremos!». Calló, inclinó la cabeza meditabundo, me pareció escuchar el ruido estruendoso de las armas en la manigua, y comprendí que aquel hombre era algo más que tribuno, algo más que genio: ¡era la Libertad!

Los movimientos reprimidos, voluptuosos del tango ofrecían ahora un carácter lúgubre; parecía el baile de la viuda india en torno de la hoguera donde va á ser sepultada. Los tertulios se callaban; estaban inquietos y tristes y sacudían la cabeza deplorando la escena. Al cabo dos lágrimas se desprendieron de los hermosos ojos de la bailadora y resbalaron lentamente por sus mejillas.

Que este enemigo se llamara sudra en la India, hebreo en Egipto, hierodul en Capadocia, esclavo en Grecia y Roma, ilota en Esparta, siervo ó hereje en la edad media, poco importa: la filosofía de la historia es la misma.

En este retrato, el joven señor estaba vestido enteramente al uso de Europa, de toda etiqueta, con corbata blanca y con un frac, tan admirablemente cortado y que le caía tan bien, que no soñaría hacerle mejor, ni Frank, el de Viena, ni el sastre más famoso de Londres. Por bajo de este retrato había otro letrero que decía: en traje de etiqueta para ir a un baile del Lord Gobernador de la India.

Palabra del Dia

metropolitanos

Otros Mirando