Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !
Actualizado: 22 de mayo de 2025
Como recuerdos de aquella época guerrera y bárbara adornaban las paredes grandes panoplias con lanzas, espadas en forma de sierra, sables ondulados y otros instrumentos mortíferos. El alma pacífica de Momaren se caldeaba en este salón, sintiendo al entrar en él entusiasmos heroicos que le hacían engendrar versos tan viriles como los de Golbasto.
Los manobos se extienden por las márgenes del Butuan, donde son numerosos, llegando hasta las inmediaciones de Davao. De endeble constitución física y pequeños de cuerpo, parecen raza degradada arrinconada hacia el interior por mandayas y moros, gente más fuerte y guerrera que ellos, aunque nunca tan sanguinarios y hábiles en el manejo de las armas.
TERPSY. La danza guerrera... Usted desconoce todavía mi enseñanza: la danza clásica en todas sus manifestaciones. ¡No hay ejercicio mejor...! ¡Desde luego aquí no aprenderá usted el tango...! TERPSY. ¡Peor para usted...! Es la única danza que hace engordar. ¡Principalmente las piernas y el bajo-vientre! LA SE
Alejandro es la pintura, el reflejo de la Grecia guerrera, literaria, política y artística; de la Grecia excéptica, filosófica y emprendedora, que se derrama por sobre el Asia para extender la esfera de su acción civilizadora. Por esto nos es necesario detenernos en los detalles de la vida interior del pueblo argentino, para comprender su ideal, su personificación.
Pues acordaos de lo que les pasó á los franceses en Courtrai, donde los gordinflones holandeses les enseñaron que sabían manejar el acero tan bien como forjarlo. ¿Qué pensáis de los españoles? preguntó Roger. Raza guerrera de veras.
Un rugido de trompetería guerrera saludó desde el antecomedor el final del brindis, y los criados reanudaron apresuradamente el servicio. Aquí ya no dan más dijo Maltrana después de los postres . Subamos al jardín de invierno a tomar el café. Ocuparon los dos amigos una mesita inmediata a una de las puertas.
El mancebo le escuchó sorbiendo sus palabras como precioso jugo de sabiduría. Habían llegado, entretanto, a la plazuela de la Catedral. El templo levantaba su mole religiosa y guerrera en la calma cerúlea del anochecer. Un último reflejo dorado se apagaba en sus almenas. El aire traía un tufillo de sartenes.
Ahora toca Juanillo, toca con todas tus fuerzas. El ciego comenzó a ejecutar una marcha guerrera. El silencioso hotel se estremeció de pronto, como una caja de música cuando se la da cuerda. Las notas se atropellaban al salir del piano, pero siempre con ritmo belicoso. Santiago exclamaba de vez en cuando: ¡Más fuerte, Juanillo, más fuerte! Y el ciego golpeaba el teclado, cada vez con mayor brío.
Oído esto, casi todos los bisoños que poco antes reíamos a carcajada tendida, saludándonos con bravatas y dicharachos, conforme a la guerrera exaltación que nos poseía, callamos, mirándonos unos a otros, para cerciorarse cada cual de que no era él solo quien tenía miedo.
En efecto; esta novela vio la luz a raíz de fracasados intentos para levantar en armas, de nuevo, a nuestra tierra, intentos que no apoyó Martí estimando que el plan no era suficiente ni el momento oportuno; brotó de su pluma cuando en desacuerdo con los caudillos prestigiosos, únicos capaces, con sus espadas heroicas y legendarias, de despertar el alma guerrera cubana parecía oscurecido, para siempre, en la política; fue engendrada en horas de la mayor penuria, en las que, no obstante, rechazando las tentaciones de la riqueza y sin otra guía que su conciencia ni otro consuelo que su inquebrantable fe en la Libertad, sus principios no capitularon.
Palabra del Dia
Otros Mirando