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Actualizado: 17 de mayo de 2025
Roguemos, porque nunca naufrague la creencia, Para que tenga un culto la excelsa inteligencia Que dice á la barbarie: «¡De aquí no pasarás!» Roguemos porque todos escriban en sus pechos Con sangre de sus venas, sus leyes y derechos, ¡Que nunca borrar pueda la tiranía audaz!
La idea del Dios personal separado del Universo le parecía un absurdo, porque Dios no sería entonces infinito, pues que estaba limitado por el mundo; la creencia de que nuestras oraciones pueden alterar el curso de las leyes naturales, un cuento de viejas para engañar a los niños; la religión, en conjunto, una serie de mitos, más o menos ingeniosos y bellos, creados por la fantasía viva, pero infantil aún de los hombres.
Hechizada quedó Poldy al contemplar los mencionados retratos. Se prendó de la hermosura y distinción de su remoto amigo. Y no pudo menos de confirmarse en la creencia de que era un príncipe indio mediatizado, un nababo, o por lo menos un brahman o un chatria de primer orden y de mucho fuste.
«¿Es posible? le replica Razonte. Los celos, de seguro, no molestarán á este matrimonio. Pero dime ¿de qué encanto se ha valido el Doctor para celebrar esta boda?» «Su cabeza añade Mysón se ha extraviado con la absurda creencia de la transmigración de las almas.
Ni faltó entre ellos quien reconoció esta verdad, improperando al vano profeta Valls, la estólida vanidad de su esperanza, infiriendo de ahí la locura de su error en pensar que era del gusto de Dios su falsa creencia, pues en vez de un Angel que los librara les había enviado un Alguacil que los prendiera.
Cuénteme usted lo que ha pasado en el Nepomuceno dijo mi amo con el mayor interés . Aún me cuesta trabajo creer que ha muerto Churruca, y a pesar de que todos lo dan como cosa cierta, yo tengo la creencia de que aquel hombre divino ha de estar vivo en alguna parte». Malespina dijo que desgraciadamente él había presenciado la muerte de Churruca, y prometió contarlo puntualmente.
Sí, le quedaba una especie de refugio que se presenta siempre cuando el pensamiento sucumbe bajo una pasión que lo abisma: era esa espera de las imposibilidades, esa creencia en las imágenes contradictorias que es, sin embargo, distinta de la locura, porque la realidad del hecho exterior puede hacerla desaparecer.
Y levantando con repugnancia la cabeza veía que en aquellos alredederes no había más ser humano que aquel hombre que todos consideraban un santo. Otras veces creía tener á su lado á una hermana en la culpa, y al levantar los ojos tropezaba con la forma de una devota y áspera matrona, cuyo corazón, según la creencia pública, había sido un pedazo de hielo durante toda su vida.
Un espíritu bondadoso y amante como el suyo necesitaba creer en la bondad y en el amor. Al arrancarle esta última creencia sangraba de dolor. Una tarde se hallaban juntas y solas. La duquesa, inmóvil en la butaca, con la cabeza echada hacia atrás, escuchaba a su hijastra leer una historia devota, la aparición de la Virgen de la Saleta.
El entendimiento ayudado de las reglas de la Lógica, ha de exâminar las cosas, y si las halla conformes á las primeras verdades, ó los fundamentos principales de la razon humana, que tantas veces hemos propuesto, entonces se resuelve, y pasa de la duda á la creencia.
Palabra del Dia
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