Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !
Actualizado: 12 de julio de 2025
12 Y Micaía consagró al levita, y aquel joven le servía de sacerdote, y estaba en casa de Micaía. 13 Y Micaía dijo: Ahora sé que el SE
Mas grande que en el triunfo en tu caida Tu sacrificio el cielo consagró: Tu sangre ha sido el riego de la vida Que fecundó la libertad ¡Adios! En mi sepulcro encomendarte quiero Las prendas que aquí deja el corazon: Algo debes ¡oh patria! al jornalero Que en tus mieses jamas se alimentó.
Visitó el Obispado dejando en todas partes memoria de su liberalidad y misericordia con los pobres, y consagró la Iglesia de Camañas, pueblo de la provincia de Teruel. En la Catedral hay un Crucifijo de marfil en Cruz de plata dorada y otras alhajas que recuerdan su episcopado.
Ese tipo lo encontró en su propia familia. Damo, su hija, llegó a ser su discípulo más ardiente; y la consagró a los dioses por un voto de virginidad perpetua, le confió todos los secretos de su psicología y se dice que le dejó sus escritos, haciéndole prometer que no los publicaría jamás.
Por cada individuo de los que ajusticiaba, mandaba celebrar treinta misas; y consagró, por lo menos, tres horas diarias al rezo del oficio parvo y del rosario, confesando y comulgando todas las mañanas, y concurriendo al jubileo y a cuanta fiesta o distribución religiosa se le anunciara.
Con un entusiasmo que tenía sus remolinos que atraían las voluntades, Ana se consagró a la piedad activa, a las obras de caridad, a la enseñanza, a la propaganda, a las prácticas de la devoción complicada y bizantina, que era la que predominaba en Vetusta.
Cuando el autor del Don Quijote, tras larga interrupción, se consagró de nuevo en sus últimos años á escribir comedias, ó, como según parece, había modificado sus ideas anteriores acerca de la esencia del drama, ó como siguió los pasos de aquéllos que antes criticara, cedió, sin duda, no teniendo otro recurso, á las exigencias del público.
Sabía que usted era un fanático por ellos y que los practica todos con éxito. Eso es exagerado; pero, en efecto, les consagro una gran parte de mi tiempo. Es posible que los burócratas, a quienes usted reprocha el no dedicarse a esos placeres, según usted higiénicos, no tienen tan mala voluntad como usted cree.
Por eso, luz de mis ojos, sólo a tí te adoro y amo; por eso los ayes míos a tí sola los consagro; y aunque solamente quieras darme un triste desengaño, tus lágrimas lo han querido: ¡yo siempre seré tu esclavo! Mientras ruge el fragor de los cañones y retiembla la tierra con pavura, y encaramado en la nubosa altura escudriña el avión los batallones;
Yo no sé donde he estado; que en ti no puede hallarse quien pretende ausentarse del noble nacimiento; pero sin duda siento que estoy en vos; pues miro que ni lloro, ni peno, ni suspiro. . . . ¡Oh soledades santas de la vida dichosa, gusto, placer, descanso i alegría! ¡Oh vejetables plantas de la edad presurosa, recreo, pasatiempo y compañía! ¡Oh fuentecilla fria que murmuras ufana, no como cortesana, á todos me consagro; y pues sois el milagro mayor de mi sosiego, goce yo vuestra paz y muera luego.
Palabra del Dia
Otros Mirando