United States or Saint Pierre and Miquelon ? Vote for the TOP Country of the Week !


Si lo que él decía era verdaderamente cierto, entonces en la muerte de Burton Blair se encerraba un secreto de los más extraordinarios, reflejo fiel del de su extraña, romántica y misteriosa vida; secreto que era inescrutable, pero absolutamente sin igual.

La leyó velozmente, y después dejó escapar un grito de espanto, comprendiendo que la hija de Burton Blair había huido del hogar.

Le di permiso a Carlini para que fumara, y, sentado en un sillón bajo, pronto el viejo me llenó la pieza con el fuerte humo y olor de su cigarro barato, a la vez que me refería los más minuciosos detalles de todo lo que había conseguido saber en ese miserable barrio florentino. El lazo secreto que había unido a Burton Blair con este misterioso italiano, era un problema que no podía resolverse.

Muchas cosas y hechos secretos habían rodeado la vida de Burton Blair, los cuales durante años nos habían intrigado, y en consecuencia, estábamos dispuestos, si era posible, a aclarar el extraño misterio que lo había envuelto en vida, a pesar de haberse llevado a la tumba el secreto de su enorme fortuna.

A bordo del Mary Clowle, en el puerto de Amberes. Era marino, como yo. ¿Pero por qué quiere usted saber todo esto? Porque contestó Reginaldo, Burton Blair ha muerto, y su secreto ha sido legado a mi amigo, el señor Gilberto Greenwood, aquí presente.

¡Muy ingenioso! observé, completamente confundido por la extraordinaria complicación del secreto de Burton Blair. ¡Y, sin embargo, las letras están escritas con tanta claridad! Así es rió el profesor. A simple vista parece el más sencillo de todos los métodos de cifras, y, no obstante, es completamente ininteligible, salvo que se conozca la fórmula exacta en que está escrita.

En la punta de la lengua tuve la observación de que el motivo que había tenido el pobre Burton para poner en su testamento esa extraña cláusula, era el temor que él le inspiraba, y que la había insertado bajo coacción; pero felizmente me dominé, y con cierta cortesía le dije «buenas noches». Que me ahorquen, Gilberto gritó Reginaldo, cuando el tuerto se hubo retirado.

Burton Blair había tenido particular predilección por el matrimonio Gibbons, y casi parecía que éstos se consideraban menospreciados porque no se les informaba de todas las disposiciones del testamento de su difunto amo. Nosotros sólo les participamos el legado de doscientas libras para cada uno que les había hecho Blair, lo cual les causó el más profundo placer.

Ahora que con mejor luz podía ver bien sus facciones, no vacilé en confirmar mi anterior sospecha: era el mismo hombre que un año antes había conocido en la mesa de Burton Blair, en su mansión de la plaza Grosvenor. Recordaba muy bien la ocasión.

, estaba dentro de un sobre de hilo, bien sellado, y con un letrero de mi padre, que decía: «Burton Blair, privado». ¿Qué podía significar? ¡Ah! yo también cavilo en lo mismo exclamé, reflexionando profundamente en el asunto y contemplando aún las tres columnas de catorce letras. Traté de descifrar aquel enigma por los métodos de uso general y conocidos, pero no pude sacar nada inteligible.