Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !
Actualizado: 4 de junio de 2025
Con priesa procuraba de ir de vuelo: Al Almiranta llega con quebranto, Que viene desmanchada y sin consuelo: Al puerto van, llamado Spiritu Santo; Con lanchas y bateles echa gente, Y él quédase en la mar acá de frente. Al tiempo del entrar, gran batería De los fuertes les dieron y flechazos: La gente indiana armaba gritería, Los nuestros, sin parar, arcabuzazos.
Llamó a Moyna, su segundo, y le dijeron que había muerto; llamó al comandante de la primera batería, y éste, aunque gravemente herido, subió al alcázar y tomó posesión del mando. »Desde aquel momento la tripulación se achicó: de gigante se convirtió en enano; desapareció el valor, y comprendimos que era indispensable rendirse.
Vamos a ver, hombre, desembucha ese secreto.... Será una gansada de las que tú acostumbras.... Desengáñate, Manolo, que tú ya no estás para salir a la calle. Debes ponerte en cura decía mientras se frotaba los brazos con una pomada olorosa que había tomado de la batería de tarros y frascos de todos tamaños que tenía delante.
Entonces, una batería Plasencia, de las situadas en los cerros, avanzó hasta emplazarse casi al alcance de los tiros contrarios, y disparó sin descanso contra las trincheras altas. Los primeros proyectiles cayeron bajos: luego, rectificada la puntería, su efecto fue terrible.
Cada roca esparcía el terror y el regocijo a un tiempo. La movible batería de brazos disparaba ruidosa metralla, cubriendo el aire de objetos; los cristales caían rotos, y hasta las persianas quedaban desvencijadas bajo la granizada de confites. En los balcones, las señoritas cubríanse el rostro con el abanico, temerosas al par que satisfechas de que las acribillasen con tan brutales obsequios.
Apartáronse del pretil, doblaron la punta de la batería y entraron en los muelles. ¿Sabes una cosa que estoy pensando, Soledad? ¿Qué? Que si por casualidad tropezásemos en este momento con Velázquez ó con algún amigo que se lo fuese á contar, podría imaginarse cualquier cosa y tendrías un grave disgusto... No lo creas.
En la punta del Izarra debió de haber en otro tiempo una batería; aun se notaba el suelo empedrado con losas del baluarte y el emplazamiento de los cañones. Cerca existía una cueva llena de maleza, donde solíamos meternos a huronear. Era un agujero, sin duda hecho en otro tiempo por los soldados de la batería, para guarecerse de la lluvia, y que a nosotros nos servía para jugar a los Robinsones.
Los ojos del fantasma eran dos linternas, los cuernos dos tacos, y la causa del ruido metálico, una batería completa de cocina, bien manejada debajo del paño. En cuanto á los berridos, un amigo mío, que por cierto no era marino, aunque formaba con ellos muchas veces, sabía darlos como el mejor piporro; los marinos de la Berrona no hacían más que acompañarle en el tono que podían.
Sobre la occidental hay una montaña, que se puede ver á la distancia de mas de doce leguas, de donde esta plaza toma su nombre: es muy peligroso navegar cerca de aquella punta, por las muchas peñas que tiene debajo. La entrada es muy profunda, y mas segura por la parte oriental. Detras de la occidental, hay una bateria graduada, construida muy cerca del agua.
Los franceses, medio resucitados con la valentía de los marinos, pudieron habilitar dos piezas, y desde lejos, y tomando por blanco la masa de nuestra caballería, disparaban bastantes tiros. Su larga trayectoria, pasando por encima de la batería española, hería las primeras filas de mi regimiento.
Palabra del Dia
Otros Mirando