United States or Saint Lucia ? Vote for the TOP Country of the Week !


Hallábame en una cama, de cuyo durísimo colchón daban fe las mortificaciones de mis huesos y la instintiva tendencia de mi cuerpo a arrojarse fuera de ella, mientras uno de mis brazos, fuertemente vendado, se negaba a prestarme apoyo, tan inmóvil y rígido como si no me perteneciera.

Si pido a usted un servicio... un gran servicio que sólo usted puede prestarme, ¿querrá usted? Ciertamente, si puedo hacerlo... y... ¿Y qué?... Y si no hace falta para ello faltar a ningún deber. Por sus labios pasó y se desvaneció la sombra de una sonrisa no exenta de lástima.

Claro apareció en mi conciencia el amor que me habías inspirado, y cuán abominable lo hacía la gran diferencia de nuestra edad, más propia que para convertirme en amiga o en esposa tuya, para prestarme, con relación a ti, por manera espiritual, el casto y limpio carácter de madre. »Yo, con todo, no supe resistirme.

En efecto, todo cuanto tenía estaba en manos de los usureros. Mi madre había ya pagado por sumas importantes. Mis amigos, cansados de prestarme dinero que nunca les devolvía, empezaban á huir de . Había llegado á un momento en que no tenía más que dos partidos que tomar: matarme ó marcharme al extranjero.

Teniendo que hacer uso de un idioma que no es el mio, debe prestarme su cooperacion en la parte literaria de este trabajo el joven Boliviano DON RICARDO BUSTAMANTE, cuya solicitud recomiendo muy particularmente á la consideracion de sus compatriotas, en atencion al noble deseo que lo anima de servir á su pais.

»Y vea usted lo que son las cosas: cifrando en este método de vida todos mis goces, esos buenos señores de Peleches creen prestarme un gran servicio aliviándome de vez en cuando de lo que ellos juzgan pesada carga para . ¡Pesada carga conversar con Nieves, recoger sus impresiones de artista y de mujer observadora, y sus confidencias siempre originales y espontáneas y tan pintorescas como todo lo que brota de su luminoso pensamiento!

Ya no habría felicidad posible en la tierra: sólo tu recuerdo dulce podría prestarme algún consuelo en ciertos momentos. ¡Oh, te juro que si te murieses, guardaría tu imagen en el corazón hasta la hora de mi muerte, y aun más allá, si posible fuera, vivirías en espíritu conmigo; y todos los días, todos los días, sin faltar uno, iría a visitarte al cementerio y a dejar sobre tu sepulcro un puñado de flores...

Hasta que repentinamente, pasados algunos meses, me dijo un día que encontraba mi proyecto muy bueno y muy santo, y que estaba dispuesto a prestarme los medios para realizarlo. Lo primero que se me ocurrió, como es natural, fue solicitar el permiso de mi padre. El P. Gil se opuso a ello. Me dijo que por entonces no era conveniente; más adelante ya veríamos.

Además, estaba enterado de lo que acariciaba el conde con una mano oculta mientras continuaba su lectura. Al sufrir sin interrupción varios días de pérdida, Lewis se mostraba suplicante: Conde, my dear conde, ¡si quisiera usted prestarme el rosario de Satán!... El sabio personaje parecía dudar.

No es preciso fijar sitio repuse . Yo tengo la seguridad de que nos encontraremos. Una súplica tengo que hacer a usted. Mi espada no es buena. ¿Quiere usted prestarme esa magnífica hoja toledana que está en la panoplia? Con mil amores: ahí va. Diómela, y cambié su arma por la mía. ¡Pobre Currito Báez! dijo riendo . Han fijado ustedes el duelo para esta noche.