Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !
Actualizado: 29 de junio de 2025
A las doce del dia empezaron á entrar algunos trozos de indios, tocando sus ruidosas cornetas, y armados de hondas y palos.
Los dioses, los héroes, la vida al aire libre, el arte por religión, un cielo lleno de pasiones humanas, el contento de este mundo... el olvido de las tristezas hondas, del porvenir incierto... un pueblo joven, sano en suma.... Quisiera saber dibujar para dar formas a estas imágenes de la Mitología que me asedian».
La huérfana gentil cerró sus ojos, Y hasta arrugó su frente iluminada Por mil destellos rojos, Al pensar en su madre idolatrada... ¡Así Rizal llenó de pensamientos Aquella hora de luz y arrobamientos!... Es arte el de decir hondas tristezas, Revestidas de fuego y de bellezas. De Luna e Hidalgo es el cantor sublime.
Las crecientes de las sierras se despeñaban por las quiebras desesperadamente, convirtiendo en mar el río que caminaba por aquellas hondas negruras del Tajo, donde y en lo más alto se alzaba el puente destruído.
El joven corrió á la cuerda y se deslizó por ella con gran presteza; las piedras lanzadas por las hondas enemigas se estrellaban contra la roca, una le rozó los cabellos y por fin otra le alcanzó en un costado, ocasionándole vivísimo dolor.
Rogábales humildemente, y procuraba disuadirlos de las supuestas quejas con los europeos: decíales que todo era falso é inventado por la malicia de los que les persuadian lo contrario; pero mas irritados con estos medios de suavidad, empezaron á manejar sus hondas, ensayando el modo con que habian de usar de ellas.
Añadian que en adelante no pagarian tributos, diezmos, ni primicias; á todo condescendian el cura, los prelados y los vocales del Cabildo, llenos de temor, viéndose en medio de 15,000 indios, todos armados de palos, piedras y hondas.
Si, visto en su conjunto y de léjos, el «Mar-de-hielo» no tiene la nitidez y tersura de los altos nevados de la cadena, porque los derrumbes y los vientos cubren la superficie de una capa terrosa, de cerca el aspecto de las hondas es de una hermosura sorprendente. A 885 met. de altura sobre Chamonix.
Con su moral de renunciamiento, de dolor y amargura, depresiva de la personalidad, que él combatirá tenazmente sabiendo cuán hondas son sus raíces y cuán esparcidas están, como fervoroso de la ciencia que era, sin ser propiamente un hombre de ciencia.
Y entonces, en ese profundo silencio, Azorín ha dicho: Orsi, toque usted algo de Beethoven... la última sinfonía... estamos solos... Y Orsi ha contestado: Beethoven... Beethoven... Azorín, un poquito de cognac por Beethoven. Y el violoncello, por última vez, ha cantado en notas hondas y misteriosas, en notas que plañían dolores y semejaban como una despedida trágica de la vida.
Palabra del Dia
Otros Mirando