Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !
Actualizado: 1 de junio de 2025
4 Y fueron, y hallaron el pollino atado a la puerta fuera, entre dos caminos; y le desataron. 5 Y unos de los que estaban allí, les dijeron: ¿Qué hacéis desatando el pollino? 6 Ellos entonces les dijeron como Jesús había mandado; y los dejaron. 7 Trajeron el pollino a Jesús, y echaron sobre él sus vestidos, y se sentó sobre él.
¿Qué hacéis? dijo asustada Esperanza. Yo no me atrevo á entrar dijo el duque. Y entonces, ¿para qué queríais que abriese? Para que salieras tú... ¡Pero Dios mío!... yo no os conozco. ¿Y qué te importa?... Sí, sí dijo con energía Esperanza ; venís encubierto, podéis ser un ladrón, haberme dado esas joyas y ese dinero para engañarme.
Este personaje fué el primero que rompió el silencio, diciéndole al soldado: Mal hacéis en despojar, ni aun en burlas, ni por un ardite, a vuestros cristianos viejos; pues tenéis a tiro modo más llano de medrar, tomándolo todo de los moriscos.
Y el bufón se levantó y abrió la ventana de su mechinal. ¿Qué hacéis, hermano? cerrad, que corre ese vientecillo que afeita. Obscuro como boca de lobo dijo el bufón. ¿Y qué nos da de eso? Y lloviendo. Pero explicáos. ¿Queréis ver al ratón en la ratonera junto al queso? ¡Diablo! dijo Quevedo . ¿Y para qué? Y después de un momento de meditación, añadió: Si quiero. Pues quitáos los zapatos.
Reflexiónalo despacio. Todo lo he pensado. ¿Y qué dirá tu novia? ¿No tengo que renunciar a mi madre? Después de esto, ¿qué desengaño he de temer? A pesar de todo, tengo confianza en ella. ¿Estás resuelto? Si vosotros me hacéis el favor que os pido, sí. Cuenta con nosotros y, sin embargo, créeme: antes trata de ablandar a tu madre. No tengo esperanza de lograr nada, pero lo intentaré.
19 Tenemos también la palabra de los profetas más firme, a la cual hacéis bien de estar atentos como a una lámpara que alumbra en lugar oscuro, hasta que el día esclarezca, y el lucero de la mañana salga en vuestros corazones. 20 Entendiendo primero esto, que ninguna profecía de la Escritura es de particular interpretación;
40 Pero ahora procuráis matarme, hombre que os he hablado la verdad, la cual he oído de Dios; no hizo esto Abraham. 41 Vosotros hacéis las obras de vuestro padre. 43 ¿Por qué no reconocéis mi lenguaje? Porque no podéis oír mi palabra. 45 Y porque yo digo Verdad, no me creéis. 46 ¿Quién de vosotros me redarguye de pecado? Si digo verdad, ¿por qué vosotros no me creéis?
Esos son sentimientos muy nobles replicó el oficial después de un instante de silencio ; pero la humanidad tiene sus derechos, y derramar sangre inútilmente es hacer el mal por el mal. Entonces, ¿por qué venís a nuestro país? gritó Catalina con voz aguda . Marchaos y os dejaremos tranquilos. Después añadió: Hacéis la guerra como los bandidos: robando, saqueando y quemando.
Me importa poco. Podrá suceder... Me importa menos. Adiós dijo precipitadamente la condesa. ¿Por qué?... Suenan pasos, y se ven luces dijo la de Lemos . Si nos encontraran aquí juntos... Quevedo apagó la luz de la condesa de un soplo, y luego sopló su linterna. ¿Qué hacéis? dijo la condesa, que se sintió asida por la cintura y levantada en alto. Desvanecerme con vos á fin de que no nos vean.
A lo cual ella respondió: ''En verdad que si tú fueras de mi padre, que yo hiciera que no te diera él por otros dos tantos, porque vosotros, cristianos, siempre mentís en cuanto decís, y os hacéis pobres por engañar a los moros''. ''Bien podría ser eso, señora -le respondí-, mas en verdad que yo la he tratado con mi amo, y la trato y la trataré con cuantas personas hay en el mundo''. ''Y ¿cuándo te vas?, dijo Zoraida.
Palabra del Dia
Otros Mirando