United States or Mozambique ? Vote for the TOP Country of the Week !


La boca se le hacía agua viendo desfilar por delante de su vista aquellas legiones de perdices, aquellos ejércitos innumerables de conejos, aquellos venados corredores y jabalíes feroces. ¡Ay! ella no había tenido el gusto de tirar a un jabalí. ¡Cuánto apetecía encontrarse frente a uno! ¿?

Y a todos. Nos aguarda un mal cuarto de hora. Despertaron al Capitán y a sus compañeros y les dijeron lo que ocurría. La cosa puede ser muy grave dijo Van-Stael . Los cocodrilos de los ríos de Nueva Guinea son feroces y no temen al hombre. ¿Empieza a subir la marea? Desde hace un cuarto de hora respondió Van-Horn. Es necesario defendernos hasta que estemos a flote.

Unas veces empuñaba el volante, otras se mantenía al lado de su chófer, un indiazo de ojos feroces y sonrisa boba que manejaba el vehículo con una autoridad natural, como si el automovilismo datase de los tiempos de Moctezuma. Nunca he creído tanto en la fidelidad de los presentimientos como cierta noche que intenté negarme á acompañar al general en su paseo nocturno.

Pero quiso su mala suerte que Enrique vino a entender, por la contracción del rostro sin duda, las ganas que le retozaban por el cuerpo, y con tal motivo empezó a lanzarle unas miradas feroces, envenenadas.

Secundado tu movimiento por otras cien ciudades, intentaste por segunda vez sacudir el yugo de esos feroces africanos: lo sacudiste y volviste á caer en él apenas se presentaron frente tus muros las tropas aliadas de Ben-Ganya y el emperador Alfonso.

No lo comprendo, tío decía Lucía, pero á veces me doy á cavilar que á Clara le han dado un bebedizo. ¡Tiene unos terrores tan inmotivados! ¡Siente unos remordimientos tan fuera de razón!... No qué sea ello. Doña Blanca le ha puesto tan feroces escrúpulos en el alma, le ha hecho recelar tanto de su apasionada natural condición... que la infeliz se cree un monstruo, y es un ángel.

Bajo aquella pequeña frente se atropellaban, se estrujaban las ideas sombrías, los deseos feroces. El matrimonio de Luis era una abominable traición.

A veces el cariño le inspiraba ideas feroces, como agarrar un palo y moler las costillas a Primitivo; coger un látigo y dar el mismo trato a Sabel. Pero, ¡ay! Nadie puede usurpar el puesto del amo de casa, del jefe de la familia; y el jefe.... Al capellán le pesaba en el alma la fundación de aquel hogar cristiano.

Son feroces en la guerra, y tienen sus poblaciones y fortalezas cerca del rio, en parages altos. De la ciudad de Lambaré, y como fué sitiada y rendida.

Su tío le había impuesto la obligación de seguir una carrera, y mientras aquél vivió, se había resignado a llevar la vida de estudiante, ajustándose a los estrechos envíos de dinero y ampliándolos con préstamos feroces, por los que firmaba a ojos cerrados cuantos papeles querían presentarle los usureros.