Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !

Actualizado: 1 de junio de 2025


¿Y en qué condiciones le conoció usted a mi pariente? le dije. ¿Está usted para bastante tiempo aquí, mi oficial? me preguntó el viejo. Mañana por la mañana he de zarpar para Buenos Aires. Pues si no tiene usted algo más importante que hacer, venga usted esta tarde a las cinco; le contaré lo que de Ugarte. Muy bien. A las cinco estaré aquí.

Dejad que le aplique a la loca el castigo que merece su falsedad. Si tuviera tiempo, me parece que le haría sentir a esa tonta que no tiene derecho a reírse de nosotros. Pero comprended, Mathys; yo estaré junto a ella, y la condesa en su enojo se exaltará tanto contra como contra ella. Estoy cansada de estas escenas odiosas; si tengo que seguir soportándolas, prefiero huir de Orsdael.

Mi cuñado partió forzosamente para América hará unos ocho días, y al partir dijo a mi hermana: «No estaré aquí para vuestro día, mas recibiréis noticias míasAyer, pues, recibimos regalos y ramos de todas partes; pero de mi cuñado, hasta las cinco, nada... nada. Salimos a dar una vuelta a caballo por el bosque... y a propósito de caballo...

Yo seré para usted todo lo que puede ser un hombre de corazón y honradez. Tenga usted en la confianza que se tiene en lo que nos ha de salvar.... Y ahora, Clara, me voy. Pero no tardaré en volver á dar mis órdenes á la pobre prisionera, cuya felicidad pende de . ¡Qué orgullo siento en esto! Yo estaré siempre alerta. Si le ocurre á usted una nueva desventura, no necesita avisarme.

Había ya entre nosotros cierta intimidad fraternal, dulce y respetuosa, que me hacía grata la vida en Villaverde. En ocasiones pensé: ¿si estaré enamorado? No; hasta entonces aquello era una amistad afable, un afecto sencillo que mi tía Pepa fomentaba a todas horas. Una vez la buena señora, se dejó decir: ¡Ay, Rorró! Si alguna vez piensas casarte... busca una mujer como Angelina. Estábamos solos.

Estaré de pie contigo y con tu madre otro día; , otro día; pero no mañana. Perla se rió é intentó desasir la mano que le tenía asida el ministro, pero éste la mantuvo firme. Un instante más, niña mía, dijo. Pero ¿quieres prometerme que mañana al mediodía nos tomarás de la mano á mi madre y á ? le preguntó Perla. No, no mañana, Perla, dijo el ministro, pero otro día.

Estoy segura de que envejeceré sin pena... casi con alegría... Porque, siendo menos joven tendré más libertad, estaré menos sujeta a las conveniencias, más cerca de usted... menos comprometedora, en fin... Así, por ejemplo, pienso con delicia que podremos viajar juntos... Y para eso hay que envejecer; pero, entretanto, si supiese cómo se han transformado para el mundo y la vida, desde que soy amada, como deseo serlo... Puede estar orgulloso del milagro que ha hecho.

Quédese Vuestra Excelencia con ellos; que, en tanto que estuvieren en casa, me estaré yo en la mía, y me escusaré de reprehender lo que no puedo remediar. Y, sin decir más ni comer más, se fue, sin que fuesen parte a detenerle los ruegos de los duques; aunque el duque no le dijo mucho, impedido de la risa que su impertinente cólera le había causado.

¡Y yo he desconocido... he rechazado un amor semejante! exclamó Arturo. Yo; yo sólo he sido culpable... pero repararé mis faltas, le consagraré mi vida entera... ¡se lo prometo, se lo juro! ¿Quién podría hoy vituperarme por ello?... ¡Estaré orgulloso de tener una amante como ella!

Anteayer me pasó una esquelita diciéndome que usted quizá me necesitaría para tratar de un asunto de intereses conmigo, y que procurara servirla lo mejor que pudiera y como si se tratara de él mismo. ¡Figúrese usted, señora marquesa, si aunque no sea más que por este solo motivo y sin contar lo que usted por propia se merece, estaré yo dispuesto a servirla en cuanto esté al alcance de mis posibles!

Palabra del Dia

vorsado

Otros Mirando