Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !
Actualizado: 23 de julio de 2025
24 ¿Cómo, pues, harás volver el rostro de un capitán, al menor de los siervos de mi señor, aunque estés confiado en Egipto por sus carros y su gente de a caballo? 25 Además, ¿he venido [yo] ahora sin el SE
Que este enemigo se llamara sudra en la India, hebreo en Egipto, hierodul en Capadocia, esclavo en Grecia y Roma, ilota en Esparta, siervo ó hereje en la edad media, poco importa: la filosofía de la historia es la misma.
Roger de Lauria y Conrado Lanza habían venido de la Italia aragonesa á formarse como hombres de mar en la marina catalana. Génova y Venecia, enriquecidas por las Cruzadas y dueñas de numerosas factorías en Oriente, veían nacer con inquietud esta tercera potencia mediterránea. La coca catalana anclaba junto á sus naves en los puertos de Egipto, en la marina de Trebisonda, en el frío mar de Azof.
Cien años despues ¿no tuviste aun en el trono de los califas á ese magnánimo Abd-el-rhaman III, que despues de haber llevado sus armas vencedoras al interior de Castilla, al Africa, al Egipto, construyó junto á tus muros los palacios de Medina Azarah y te arrulló al melodioso son de los sublimes cantos que inspiró á tus poetas? ¿No viste á poco brillar de nuevo la estrella de Augusto en la frente del generoso el Hakem, de ese el Hakem II de quien dijeron los árabes que habia logrado convertir en rejas de arar tus armas, en pacíficos labradores tus guerreros? ¿No viste entonces cubrirse de flores tu campiña; de numerosos rebaños, las cumbres de tus cerros; de una rica vegetacion, las faldas de tus colinas pintorescas; de sabios, tus alcázares dorados; de peregrinos, tu mezquita djehma; de oro, tus robustas arcas?
Ibanme persiguiendo por las señas que de mi persona les habian dado; y se encontráron á la raya de Egipto con otra de mi estatura misma, y que acaso era mas hermosa. Estaba bañada en llanto, y andaba desatentada, de suerte que no dudáron de que era la reyna de Babilonia, y la conduxéron á Moabdar.
8 Así pues, no me enviasteis vosotros acá, sino Dios, que me ha puesto por padre del Faraón, y por señor a toda su casa, y por enseñoreador en toda la tierra de Egipto. 9 Daos prisa, id a mi padre y decidle: Así dice tu hijo José: Dios me ha puesto por señor de todo Egipto; ven a mí, no te detengas.
El joven español ocultó la cabeza entre sus manos. ¿Y su hermana? preguntó. Me quedaba aún una última prueba de afecto que darle, y se la di. ¿Cuál? La maté, Blasillo. ¿Mató también a su hermana? ¡Usted fratricida! ¡Anatema! ¡Niño! ¿sabes tú qué suerte espera en Egipto a una joven de mi raza que se ha dejado seducir, cuando el seductor es casado?
9 Subió, pues, Sisac rey de Egipto a Jerusalén, y tomó los tesoros de la Casa del SE
En su tránsito por Egipto, vio y admiró donna Olimpia la esfinge, las pirámides y multitud de otros monumentos del tiempo de los Faraones. Llegada sana y salva a Alejandría, se embarcó con su gente en un barco mercante de Venecia, que navegaba con diploma o patente del gran turco Solimán, a quien para obtener tales diplomas pagaba un considerable tributo anual la Señoría.
Su amigo Cador que estaba de vuelta en Babilonia, habiéndole buscado en Egipto, mandó llevar á su quarto una armadura completa que le enviaba la reyna, y tambien con ella el caballo mas lozano de la Persia. Bien vió Zadig que estas dádivas eran de mano de Astarte, y adquirió nuevo vigor, y esperanzas nuevas su amor y su denuedo.
Palabra del Dia
Otros Mirando