United States or Liberia ? Vote for the TOP Country of the Week !


Los buenos creyentes daban, pues, por seguro que Parsondes había subido a la región de la luz increada, cerca de Ahura-Mazda, donde brillaba casi tanto como los Amschaspandes y los Izeds, y donde eclipsaba, a su propio feruer con beatíficos resplandores.

La consideraba á usted santa; pero ahora veo que su sabiduría iguala á su virtud, y á su lado me encuentro tan pequeño, que me da vergüenza. : una persona á quien se trata con tanta dureza no puede ser buena dijo Paula. El amor hace prodigios; hace de los hombres incultos y malos, hombres mansos y buenos; hace de los melancólicos y descreídos, seres felices, creyentes y cariñosos.

Ormuz y Siva, Venus y Rea, Jesus y María, no recibirán de los Muslimes idolátrico culto; el único símbolo que en nuestra aljama pondremos será esa gallarda curva sostenida en el aire, que recordará á los verdaderos creyentes la afortunada huida del Profeta á Medina.

Las cosas en tal punto, veo que aparece en la estancia Abu-el-Casín, capitán de la guardia africana, y prosternándose diez veces ante el Sultán, y tocando otras tantas la tierra con su frente, dijo: Príncipe de los creyentes, un loco que días ha vaga cantando y danzando por la ciudad, habrá una hora que en medio del estupor que ha causado la nueva de la catástrofe de la Sultana y del alboroto que ha movido el descubrimiento de su enfermedad, púsose de nuevo a bailar en el Zuc de los benimerines y en voz clara cantaba: A la Sultana nadie la cura, si no es el rey de la locura.

Unos pretendian que debia estar al sur como habia estado siempre, y como la habia situado An-nasír en su mezquita de Azzahra; al paso que los mas entendidos en matemáticas y astronomía sustentaban que debia fijarse un tanto inclinada hácia el oriente . Divididos así los pareceres, el faquíh Abú Ibrahim se presentó á Al-hakem, y le dijo: ¡Oh príncipe de los creyentes!

Ya ha pasado un gran espacio desde que la voz enfática del muecin de la mezquita, llamó á la postrer plegaria de la noche á los creyentes. ¿Cómo tanto Ataide tarda?

Era ya anochecido cuando aquella segunda procesión entraba en la Alhambra, sirviéndole de bastonero el agradable Abu-el-Casín, capitán de la guardia africana, quien, pasando a la estancia en que sobre su solio aguardaba el Sultán, le dijo a éste, tocando antes diez veces la tierra con su frente: Príncipe de los creyentes, ya llega el loco sobre los lomos de la sabiduría.

Un día, en Evian, la había acompañado a una capilla donde se celebraba una fiesta que atraía a los creyentes desde los lugares más lejanos, y él también había inclinado la descreída frente, lo mismo que todos aquellos seres humildes, pero no tanto para seguir el ejemplo de los fieles, como para ocultar el llanto que le cegaba.

"El cuerpo, que es el irreconciliable enemigo del alma en la doctrina cristiana" está recibiendo ahora, hasta de los creyentes en la virtud póstuma, de la mugre y de las llagas, atenciones que el gran Pascal hubiera considerado pecaminosas.

»Ábrase paso el gentío de los creyentes al cuerpo de la mezquita por once puertas circulares que correspondan á otras tantas naves, tendidas del algufia á la quibla , y la nave central sea mas espaciosa que las laterales, descubriendo en su fondo á los extasiados ojos de los muslimes la maravilla nunca vista.