Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !

Actualizado: 22 de mayo de 2025


La cantinela de siempre dijo riendo Leonora, remedando la voz y la expresión del joven. ¿Y si no puedo? ¿Por qué no ha de poder usted? ¿Por qué ha de ser verdad ese amor tan inmenso por una mujer que ve usted ahora por segunda vez? Esas pasiones repentinas se las inventan ustedes; no son verdad; las han aprendido en las novelas o las han oído cantadas por nosotras en las óperas.

Iba a Valencia en invierno para oír las óperas que elogiaban los diarios, y en un rincón de su tienda tenía montones de novelas y periódicos ilustrados, reblandecidos por la humedad y con las hojas gastadas por el continuo roce de los parroquianos.

A propósito de piano... aunque ya está viejo el alcacer para zampoñas, yo quisiera saber teclear, así... un poco... aunque no fuera más que tocar con un dedo las óperas esas que tocas en la flauta. A Bonis le pareció muy laudable el propósito.

Clara subió a cambiar de traje y mientras tanto los invitados bebieron aperitivos, escuchando a la ciega que no cesaba de charlar y reír contando como si lo hubiese visto todo lo que pasaba en Madrid, las obras dramáticas que habían tenido éxito, las bodas aristocráticas, las óperas, los conciertos, hasta las sesiones borrascosas del Congreso. ¿No sabéis?

Es más: siento á veces la satisfacción del que disfruta gratis las cosas; y cuando contemplo los paseos hermosos, cuando asisto á los conciertos y á las óperas y gozo la dulce paz de una ciudad en la que no hay miseria ni revolucionarios desesperados, me digo: «Esto lo pagan los jugadores y yo lo disfruto. Ellos pierden para que yo viva bien

En veintitrés días compuso su gran obra El Mesías, a los cincuenta y siete años, y cuando murió, a los sesenta y siete, todavía estaba escribiendo óperas y oratorios. Haydn fue casi tan precoz como Haendel, y a los trece años ya había compuesto una misa; pero lo mejor de él, que es la Creación, lo escribió cuando tenía sesenta y cinco.

De repente salió del puente gigantesco del vapor Paraná una armonía profunda que hizo vibrar las brisas de la noche. Ese vapor tenia su banda de orquesta y su primera sonata me estremeció de placer, porque me trajo mil recuerdos de la patria: era el Trovador, esa tempestad de vigorosas armonías de Verdi, el artista de las óperas románticas, el compositor de los conciertos ruidosos y ardientes.

Muchísimo; es una de las óperas que más me gustan. Daría cualquier cosa por conocer un instrumento para poder tocarla toda. ¡Qué dulzura hay en ella! ¡Qué inspiración!

En casi todas estas fiestas, que servían de regocijo á la corte de Felipe IV, había siempre, como parte integrante de ellas, así música como bailes, predominando al fin de tal manera uno y otra, que se transformaron por último en verdaderas óperas.

Lo absurdo y lo indisculpable fuera en , que no pido ni puedo pedir en estas soledades agrestes las óperas del Teatro Real, ni los salones del gran mundo, ni los trenes lujosos de la Castellana, exigir a estos pobres campesinos la elocuencia de nuestros grandes tribunos, las habilidades de nuestros políticos y el saber de nuestros doctores y académicos.

Palabra del Dia

commiserit

Otros Mirando