Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !

Actualizado: 13 de mayo de 2025


En efecto, puede una sacrificarse de mil modos repuso la Fontane muy risueña. Se trata de encontrar el bueno dijo Francisca, que generalmente proclama que la abnegación es un asunto de edad y de temperamento. Todos son buenos respondió la Fontane.

Si el hombre de imaginación tiene una compañera de temperamento fantástico como el suyo, ambos corren peligro de precipitarse en la desgracia.

El seminarista español se indignaba contra su antigua fe con toda la fogosidad de un temperamento vehemente. ¡Y él había podido creer en todo aquello, considerándolo el resumen de la humana sabiduría! El cristianismo desempeñaba un papel beneficioso en un período de la infancia de la humanidad.

Era pacífico por naturaleza y de un temperamento tan conciliador, que nadie podía venir á las manos con otro en su presencia: en seguida saltaba hecho una furia sobre los contendientes, y los obligaba á separarse con grave detrimento de sus pantalones, cuando no de las pantorrillas.

La tía Jeroma, madre de nuestro diputado Bartolo; la tía Brígida, su prima hermana y madre del prudente Quino; Elisa, joven de veinticinco años, recién casada, con temperamento y aficiones de vieja, y que por tenerlas todas hasta fumaba como ellas cigarrillos envueltos en hojas de maíz; por último, la vieja Rosenda, una mujer que vivía sola en un hórreo y que algunos tenían por bruja.

Al cabo de un rato los rostros empezaron a reflejar el cansancio, poniéndose rojos o pálidos, según el temperamento de cada uno. Con la boca entreabierta, las mejillas inflamadas y la frente cubierta de sudor, no ofrecían otra expresión que la de la estupidez más cumplida.

Dada la emoción e intensidad de sus obras religiosas, no tememos el menor motivo para dudar de la sinceridad del movimiento que llevó a Lope al sacerdocio, aunque su inquieto espíritu no le haya permitido perseverar por mucho tiempo en aquella estrecha vía, como no perseveró en cosa alguna que no fuera abandonarse a la torrencial espontaneidad de su temperamento.

Aunque nuestro joven no tuviese un temperamento irritable, antes al contrario había dado siempre pruebas de paciencia, los modales groseros, despreciativos, del presbítero estaban a punto de hacérsela perder. El porvenir de Llot se dignó al cabo decir es de un género particular.

O porque no tuviese secretos que contar, o por su temperamento excesivamente reservado, la primogénita de Belinchón huía de hablar de misma con un cuidado extraordinario. Ni sus alegrías ni sus pesares eran conocidos de nadie. Sólo un observador muy fino podría, a fuerza de costumbre, averiguar vagamente las emociones que la agitaban. Gonzalo no lo era.

Privadamente estos dos jóvenes, afines por carácter y temperamento, se miraban como hermanos, tenían una misma bolsa, comían en un mismo plato, y confundían en un común sentimiento sus pesares y alegrías. Desde la salida de Lázaro para su pueblo no se habían visto. Cuánto me alegro de que vengas acá! dijo Javier, abrazándole otra vez. Hacen falta jóvenes como .

Palabra del Dia

commiserit

Otros Mirando