Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !
Actualizado: 5 de julio de 2025
Y finalmente podrá conseguirse la mayor de las utilidades, que consiste en hacer hombres, y hombres cristianos á este gran número de salvajes.
¡Ah! es verdad... ¿Sabes los víveres que nos quedan a bordo, gracias al festín que os he dado, salvajes? ¡Pues bien! no nos queda más que una caja de galleta, tres toneladas de agua y una caja de ron; porque en un día habéis echado a perder los víveres de tres meses. Tanta culpa es de los de aquí, como de los que quedan allá.
Aquellas actitudes lánguidas y artísticas que las damas adoptaban, debían de estar destinadas a mover la Voluntad Divina. Pero como un fin enteramente secundario también tenían por objeto la edificación de los fieles salvajes que las contemplaban.
No sé donde hallar el leteo ni el nepentes, dijo, pero he aprendido muchos nuevos secretos entre los salvajes; y esta receta que me dió un indio en cambio de algunas lecciones mías, tan antiguas como Paracelso, es uno de esos secretos. Bebe esto. Será sin embargo menos calmante que una conciencia limpia y pura; pero no puedo darte eso.
Ciertos viejos de aire magistral batían palmas ante un grupo de diablillos color de chocolate con pinceles de pelos sobre las orejas, que aprendían a bailar, moviendo grotescamente los pies y los brazos, agitando su panza con salvajes contorsiones.
No podía compararse con ella la de los Guevaras, ni la de los Peraltas, ni la de los Zapatas, ni aun la de los Salvajes: se parecía a las de Oñate y Miraflores. Sus dueños le decían el palacio... y, sin embargo, no pasaba de ser un caserón destartalado, de grandes salones, tremendos patios y pasillos laberínticos.
¡Compañeros! nuestras glorias son de los salvajes presa; vamos por ella, llevando rayos de acero en la diestra, el agravio, en la memoria y la fé, en la Providencia!"
Aquí estamos olvidados y hechos unos salvajes continuó don Roque ; pero esto no es mas que la Patagonia, y hace unos años nada más que empezó en ella la civilización. En cambio, compañero, ¡cómo ha adelantado el resto de nuestro país en menos de medio siglo!... ¡Pucha! ¡Qué cosa bárbara!
Los mozos aturden las calles del arrabal con sus voceríos salvajes, y son todos dados al adufe, a la gaita, a las sonajas, a los entretenimientos lúbricos de la danza y a los paseos de fuentes y pensiles que corrompen y reblandecen el ánimo.
Esto me explica por qué la flecha y el arco se encuentran en todos los pueblos salvajes, cualesquiera que sea su raza, su origen y su colocación geográfica.
Palabra del Dia
Otros Mirando