Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !

Actualizado: 30 de septiembre de 2025


Y había que ver a los vendedores, verdaderas sanguijuelas normandas que adivinaban una presa fácil, seguirle los pasos, meterle en el bolsillo pitos, rosquillas y golosinas y ponerle delante de las piernas rosados cochinillos y rizados y blancos corderos. ¡Cómpreme usted algo para su señora! «¡Su señora

Colócase en el cuello el pañuelo que tenía anudado en la cabeza, y sus cabellos rizados y en desorden, que caen sobre la frente y la nuca, se ponen a flotar al viento, felices por haber recobrado la libertad. La mirada de Juan se detiene admirada sobre la belleza fresca y virginal de aquella joven, que tiene las maneras de una niña sencilla y traviesa.

La aldea se compone de unas 25 ó 30 chozas miserables, diseminadas sin órden alguno sobre el plano arenoso de una vega circundada de altísimos bosques, y en toda el área del pobre caserío multitud de palmas de cocotero hacen flotar al viento sus rizados plumajes.

¡Ah! dijo. Allí está Rubín con los caballos. También los había visto el pajecillo, cuyos rubios y largos cabellos rizados rodeaban el gracioso rostro. Cabalgaba alegremente, llevando de la brida el blanco palafrén causa involuntaria de las aventuras de su dueña. ¡Os he buscado en vano por todas partes, mi señora Doña Constanza! gritó agitando en el aire la emplumada gorra.

También se veían grupos de apimachus albus, aves del tamaño de gallinas, con el plumaje blanco plateado en la parte posterior del cuerpo y negro en la anterior, con colas rarísimas formadas de seis o siete penachos rizados; bandadas de promerops superbi, aves de negro plumaje, cola larga y espesa y un penacho de plumas en la cabeza, y papagayos de multitud de variedades: amarillos, grises, azules y rojos, también en bandadas.

Véome envuelto, rozado, confundido dentro de ese torbellino de vellones rizados, de balidos; una verdadera marejada, en que parece que los pastores son arrastrados con su sombra por olas que saltan... Detrás de los rebaños percíbense pasos conocidos, voces alegres. La cabaña está llena, animada, ruidosa. Chisporrotean, al arder, los sarmientos formando llama.

Tenía la barba erizada y la frente llena de arrugas, como San Pedro; el cráneo terso, y dos rizados mechones blancos en las sienes. «Señor, señor decía con el temblor de un frío intenso, mire cómo estoy, míremeTorquemada pasó de largo, y se detuvo á poca distancia; volvió hacia atrás, estuvo un rato vacilando, y al fin siguió su camino.

Sus cabelleras, fuertemente retorcidas, apelotonábanse sobre la testa con la forma del peinado frigio, y quedaba al descubierto, sobre el extremo de la espalda nacarada, cubierta de una película tenue y fina de melocotón sazonado, la nuca morena, de un delicioso color de ámbar, erizada de pelillos rebeldes y rizados que parecían estar puestos allí para estremecerse nerviosamente con los suspiros de amor.

Solamente sus cabellos castaños, espesos y ligeramente rizados, recordaban un poco la opulenta cabellera de la señora Miguelina. El tono de su voz era algo brusco y áspero, aspereza de manzana silvestre que no se dulcificaba un poco sino cuando contestaba a las preguntas de la señora Liénard. Con ella tomaba súbitamente su voz entonaciones afables, casi tiernas.

El campesino desciende de la aldea, el arriero camina pausadamente detrás de las mulas y el pastor sigue a sus ovejas. Cada hora que se aproxima es testimonio de otras escenas. Algunas veces una sola ráfaga de aire basta para cambiarlo todo. Todas las selvas se inclinan, los sauces se blanquean en sus copas, los arroyos aparecen rizados en su superficie y los ecos suspiran.

Palabra del Dia

aprietes

Otros Mirando