Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !
Actualizado: 30 de junio de 2025
En resolución, los dos regidores, a pie y mano a mano, se fueron al monte, y, llegando al lugar y sitio donde pensaron hallar el asno, no le hallaron, ni pareció por todos aquellos contornos, aunque más le buscaron.
10 Y viniendo también los primeros, pensaron que habían de recibir más; pero también ellos recibieron cada uno un denario. 11 Y tomándolo, murmuraban contra el padre de la familia, 12 Diciendo: Estos postreros sólo han trabajado una hora, y los has hecho iguales a nosotros, que hemos llevado la carga y el calor del día.
La mujer ocupaba tan poca plaza en el mundo antiguo, que era fácil tratarla como una cantidad despreciable; y sin preocuparse de lo que podía pensar, los señores hombres no pensaron más que en hacer una vida de placeres y de feliz quietud, exenta de los cuidados de la paternidad y de las cargas de familia.
Y hasta el amanecer estuvieron fantaseando sobre el porvenir, arreglando todos los detalles de la fuga. Ella partiría cuanto antes; él iría a su encuentro dos días después cuando hubiese renacido la confianza y todos la creyeran lejos, muy lejos. ¿Dónde se encontrarían? Primero pensaron en Marsella, pero era demasiado lejos. Después en Barcelona. Regateaban las horas y los minutos.
De sus remordimientos por no haber hecho bastante por tu causa y de su deseo de reparar su falta. Pero ¿qué intentáis? Escucha. En el momento de la sentencia protestaste de tu inocencia con toda la energía de que eres capaz. Nadie te creyó. Los que más te amaban, pensaron que habías obrado en un momento de locura, pero con gran dolor suyo, tuvieron que privarse de defenderte.
Las comadres de la villa no les perdonarían que se hubiesen sustraído a este auto acordado de las tertulias de Nieva. Ya sabemos de buena tinta que los muchachos no pensaron en semejante substracción, y que acataban con la mayor humildad el fallo soberano.
Gritaron las mujeres, se conmovieron los hombres, acudieron los criados. Todos están tan asustados que no saben más que gritar: ¡Un médico...! ¡una jofaina...! ¡un vaso de agua! El vómito fue terrible. Pensaron que se quedaba en él. Cuando cesó le transportaron a una cama en las habitaciones que había ocupado Tristán de soltero.
Estaba él convencido de que sabía latín, y citaba a veces los autores más célebres, aplicándoles lo que estos desgraciados no pensaron nunca en decir. ¡A tales imputaciones calumniosas está expuesta la celebridad!
Igualmente interesadas Benina y Juliana en la buena o mala suerte del hijo de Algeciras, oyeron atentas lo que Antonio les refirió de las consecuencias funestísimas de la caída del jinete en el camino del Pardo. Cuando le vieron en tierra, despedido por el jaco, pensaron todos que en aquel crítico instante había terminado la existencia mortal del pobre caballero.
¿Nunca pensaron, ni siquiera en los primeros tiempos, en unirse legalmente en matrimonio? Yo desconozco esa ley. ¿Ella no sufría con una situación que para sus sentimientos cristianos debía ser inmoral y punible? Había contraído el compromiso ante su Dios. Viviendo con ella, durmiendo bajo el mismo techo, conociéndola íntimamente, es imposible que no haya visto usted prepararse la catástrofe.
Palabra del Dia
Otros Mirando