Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !

Actualizado: 9 de junio de 2025


A todos los cuartos, tío, para mirarme en todos los espejos. ¿No veis qué bien estoy? , en efecto, no estás mal. ¿No es cierto que con un traje bien hecho, tengo un lindo talle? ¡Lindísimo! respondió el señor de Pavol, besándome en las mejillas y encantado con mi alegría. ¡Ah! tío, ¡qué feliz soy! Opino que el caso extraordinario se presentará muy pronto.

El salon en que estamos ocupa todo el cuerpo del edificio, de Norte á Sur. Tiene balcones á la calle y al patio del Palacio Real, un patio que es todo un lindísimo paseo, con árboles, glorietas y fuentes, y cuya extension excede acaso á la de la Plaza Mayor de Madrid.

El portal.... ¡Qué portal! ¡Una maravilla! Fué obra de tía Carmen: era un portal lindísimo, de cristal, con estrellas, soles y cometas, y ángeles, y serafines, y arcángeles que tenían en las manos bandas de seda con letreros dorados que decían: «Gloria in excelsis Deo». Mi tía Carmen le hizo con prismas y candeleros de cristal, y fué el encanto de cuantos le vieron.

Cuando pasó la comitiva encontré a Andrés Marijuán, el cual me dijo: Me han magullado un brazo dentro de la iglesia. ¡Qué gentío! Pero me propuse ver todo y lo vi. Lindísimo ha estado. ¿Pero ya empezaron los discursos? Hombre no.

No era ella muy fuerte en disimular, y otro menos alucinado que Rubín habría conocido que el lindísimo entrecejo ocultaba algo. Pero veía las cosas por el lente de sus ideas propias, y para él todo era como debía ser y no como era.

De pronto se pone un traje negro, severo y elegante a la vez. ¿Y éste? pregunto. Para ir a misa a Stella Maris. ¿Te gusta? ¡Lindísimo, muy grave, muy chic!... ¡Oh, la gravedad chic es lo más chic de la gravedad! Hay que recordar, de vez en cuando, que una, es viuda. En la salita, colgado en alto, hay un retrato al óleo.

EN LA FALÚA DE LAS DE CIUDAD. ¡María Julia, Consuelo, mirad qué bonito hace el agua metiendo la mano dentro! ¡Lindísimo! Se va usted a mojar el vestido, Amparo. ¡Mire usted qué penachitos blancos tan monos salen por entre los dedos, Suárez! Preciosos..., pero se va usted a mojar la manga del vestido. Aguarde usted un poco... Me la voy a remangar... Ea, ya está bien... Mire usted, mire usted...

Imploro tu perdón, Linilla mía. Perdóname; no volveré a pensar en eso, y si pienso en esas cosas no te las diré. ¿No es verdad que me perdonas? ¿Verdad que ? «El pañuelo está lindísimo; el monograma es soberbio, muy elegante, y muy sencillo, como dibujado y bordado por . Saluda a tu papá, si crees oportuno hacerlo, de modo que no sospeche nuestros amores.

Usted sabe que yo pinto, ¿verdad? Pinta unos cuadritos que parecen música; todos llenos de una luz que sube; con muchos ángeles y serafines. ¿Por qué no nos enseñas el último, Ana mía? Es lindísimo, Pedro, y sumamente extraño. ¡Adela, Adela! De veras que es muy extraño. Es como en una esquina de jardín y el ciclo es claro, muy claro y muy lindo.

Tristán se calmó, y Elena, con su natural ligereza, pasó inmediatamente a otra conversación. ¡Pero qué lindísimo budoir el tuyo, Elena, qué coquetón, qué elegante! le decía Visita aludiendo al del hotel que estaba terminando en Madrid. ¿Te gusta? Muchísimo. ¡Qué guirnaldas talladas! ¡qué rico mosaico el del pavimento! ¡qué pinturas tan finas las del techo!

Palabra del Dia

metropolitanos

Otros Mirando