Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !

Actualizado: 5 de septiembre de 2025


-Déjenme besar -respondió Sancho-, porque me parece vuesa merced el primer santo a la jineta que he visto en todos los días de mi vida. -No soy santo -respondió el hidalgo-, sino gran pecador; vos , hermano, que debéis de ser bueno, como vuestra simplicidad lo muestra.

-Cuatro hombres -respondió el ventero- vienen a caballo, a la jineta, con lanzas y adargas, y todos con antifaces negros; y junto con ellos viene una mujer vestida de blanco, en un sillón, ansimesmo cubierto el rostro, y otros dos mozos de a pie. ¿Vienen muy cerca? -preguntó el cura. -Tan cerca -respondió el ventero-, que ya llegan.

Despídete de las gentes de que tengas que despedirte, porque esta misma noche marchamos á Nápoles. Todos los cuidados los llevo conmigo. Bien; busca un buen coche de camino, ajústalo para Barcelona y llévalo al mesón del Bizco. Muy bien. Después busca diez hombres bravos, con sus caballos, armados á la jineta y con arcabuces, que no están los caminos muy buenos para ir desprevenidos.

Salió, en fin, Sancho, acompañado de mucha gente, vestido a lo letrado, y encima un gabán muy ancho de chamelote de aguas leonado, con una montera de lo mesmo, sobre un macho a la jineta, y detrás dél, por orden del duque, iba el rucio con jaeces y ornamentos jumentiles de seda y flamantes.

Lector amigo: yo he escrito este discurso, que no me he atrevido a llamarle libro, pasándome de la jineta de los consonantes a la brida de la prosa, en las vacantes que me han dado las despensas de mi familia y los autores de las comedias por su Majestad ; y como es El Diablo Cojuelo, no lo reparto en capítulos, sino en trancos . Suplícote que los des en su leyenda , porque tendrás menos que censurarme, y yo que agradecerte . Y, por no ser para más ceso, y no de rogar a Dios que me conserve en tu gracia.

Sus espuelas arañan las losas, tric, tric, tric, tric, y a veces la contera va dando contra el muro, tac, tac... Mi padre dice que Ramiro desciende de los linajes más antiguos y claros de Castilla. Tric, tric, tac, tac remedó burlescamente la dueña. ¡Licenciado no le quiero, pero si volviese aína de alguna guerra, con la jineta de capitán! Don Alonso no perdió una sola palabra de aquel diálogo.

Palabra del Dia

plástico

Otros Mirando