Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !

Actualizado: 10 de julio de 2025


Y con gran escándalo de Manzanares comenzó a entonar a todo pulmón una romanza. Unos marineros que pintaban de blanco las tuberías para el riego de la cubierta volvieron la cabeza, riendo con simplicidad infantil. Pero hombre, ¡cállese! protestó el comerciante . ¿Y usted va a Buenos Aires a hacer fortuna?... Lo primero es ser hombre serio, para inspirar confianza.

Un halcón que acababa de devorar a su apresada víctima, se fijó en Jacobo Melín con sorpresa porque debió reconocerle probablemente un cierto grado de parentesco, al mismo tiempo que la superioridad del hombre, ya que con una capacidad superior para la rapiña, a él no le era dable entonar canciones. De nuevo don Jacobo en el camino real, emprendió otra vez rápida marcha.

Pero, día por día, iba encontrando en él algo que modificaba sus primeras impresiones: la blancura femenil de Karl más allá de la cara y las manos tostadas por el sol; la creciente marcialidad de sus bigotes; la soltura con que montaba á caballo; su aire trovadoresco al entonar con una voz de tenor algo sorda romanzas voluptuosas con palabras que ella no podía entender.

El desfile lúgubre parecía marchar contra la corriente de la Naturaleza, perdiendo a cada paso su fúnebre gravedad. En vano gemían las trompetas lamentos de muerte, y lloraban los cantores al entonar sagradas coplas, y marcaban el paso con ceño de verdugos los espantables sayones. La noche primaveral reía, esparciendo su respiración de perfumes. Nadie podía acordarse de la muerte.

Entre el clero, que fue muy numeroso, acudió lo más afamado de la vicaría en el canto fúnebre, y, por ende, no faltó el párroco de Zarzaleda, que era una especialidad muy admirada, y no sin razón de fundamento, para entonar el Dies irae con su voz atenorada y vibrante, que ponía los pelos de punta a los fieles más duros de conmover; y concurrieron también con estos párrocos muchos de sus feligreses que, sin parentesco ni afinidad personal alguna con el difunto, eran fervientes admiradores de su buena fama.

Al mismo tiempo que alude claramente al paganismo, la prohibición de celebrar juegos y danzas y entonar cánticos idólatras, y la de cubrirse en las Calendas de enero con pieles de ternera ó de ciervo , prueba también la mención que se hace de las fiestas de los santos, que lo consagrado en un principio á la alabanza de los dioses empieza á servir para el culto cristiano.

Para infundir en la mente de mis lectores un elevadísimo concepto y para entonar un himno en alabanza de la Compañía de Jesús, no he de ir yo á buscar frases y datos en libros escritos por jesuítas, ni en disertaciones é historias de católicos fervorosos y hasta fanáticos, sino que tomaré los datos y frases en un autor inglés, criado en el protestantismo y librepensador más tarde: en el famoso historiador y ensayista lord Macaulay.

Dejé resbalar mis lágrimas por las mejillas sin cuidar si me miraban. Gloria volvió a entonar otra copla, y luego otra, y luego otra. No se cansaban de pedirle más, y ella de complacerles. Un suceso inesperado vino a destruir el arrobamiento en que todos estábamos.

Cuando hubo pasado por delante de una danza, a una aldeana se le ocurrió entonar cierta copla de un antiguo canto de aquella comarca: Si me llevan prisionero, No me llevan por ladrón: Me llevan porque he robado A una niña el corazón. Andrés no pudo menos de sonreír, y volviendo el rostro hacia aquel sitio hizo un saludo con la mano. Los civiles también sonrieron.

Jaime conocía las costumbres del viejo, su afición a entonar los cánticos de la misa mayor cada vez que se sentía alegre. Retirado de las largas navegaciones, su placer era cantar los domingos en la iglesia del pueblo de San José o en la de San Antonio, extendiendo luego esta afición a todos los momentos felices de su vida.

Palabra del Dia

buque

Otros Mirando