Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !
Actualizado: 3 de mayo de 2025
Aquella noticia acabó con las vacilaciones de la joven cuya mente, por lo demás, estaba ya bastante trabajada merced á tantas noches en vela y á sus horribles ensueños. Pálida y con los ojos estraviados, buscó á hermana Balî y, en voz que daba miedo, le dijo que estaba dispuesta y la preguntaba si la quería acompañar.
Todo lo grande despierta en el alma cuantos sublimes ensueños se elaboran en los misterios de la admiración. El espectador se encarna con el cuadro que presencia, se paralizan sus sentidos y el éxtasis alienta las más tiernas creaciones. Un poeta ante la cascada del Botocan, resucita todos los colosos del sentimiento, y al murmurio de las ondas, recuerda sus inmortales producciones.
Los fundadores de una nueva colonia, cualesquiera que hayan sido los ensueños utópicos de virtud y felicidad que presidieran á su proyecto, han considerado siempre, entre las cosas más necesarias, dedicar á un cementerio una parte del terreno virgen, y otra parte á la erección de una cárcel.
Cuando es plenilunio, entro en el boscaje, de ensueños poblada la imaginación, y bajo la sombra del tibio follaje me siento muy niño, más cerca de Dios. Es la confidente de mis hondas cuitas la luna que argenta mi amado jardín, y me habla de aquellas prestigiosas citas que tuve con ella en un mes de Abril. Los recios flabelos de los cocoteros meciendo mi sueño, cantan sin cesar.
El Magistral empezaba a despreciar un poco los años de su próxima juventud, le parecían a veces algo ridículos sus ensueños y la conciencia no se complacía en repasar todos los actos de aquella época de pasiones reconcentradas, poco y mal satisfechas.
Ella se contentaría con un beso el día de las victorias, endulzaría con una frase las amarguras, y lejos de pensar que el matrimonio es el egoísmo de dos, sus ensueños de ventura se lo hicieron vislumbrar como la abnegación de uno solo. Josefina no amaba todavía a Félix.
La hermosa aparición llegaba hasta él por fin, y le arrebataba entre sus brazos por los espacios azules. Otras, navegaba en frágil barquilla por la superficie del Océano. Estos ensueños de dicha, versificados con facilidad y adornados de cierto naturalismo poético, causaban alguna inquietud a los padres de familia. Periquito comía cada día más, y estaba cada vez más flaco.
Procuró adivinar el probable porvenir de Adriana. Sin duda ningún otro amor nacería nunca en su corazón. Pero la vida y el ambiente recobrarían sobre ella sus derechos. Revestida entonces de una engañosa superficialidad, se recogería en esa penumbra íntima que suele ser, para las mujeres semejantes a ella y a las Aliaga, el ignorado refugio de los ensueños, el mundo interior que nadie sospecha.
Tampoco el hombre "no" advierte del tiempo la brusca huida, ¡que al par que le da la vida, le va arrastrando a la muerte! Contemporáneo. Natural de la Pampanga. Lentamente se mustian mis pobres ilusiones Tristemente se mueren mis ensueños en flor... Y en todas mis endechas y en todas mis canciones Solo hay cantos de pena y quejas de dolor.
Y sus ojos, que parecen dos sagitarios brillantes, nos arrojan por el arco de sus párpados soñantes flechas de amor que se clavan, temblando, en el corazón... Figulina delicada, no es frívola ni es coqueta, sino hermana cariñosa de su ardiente fantasía; es mística, cual lo son los ensueños de un poeta que se agrandan como el vuelo de melódica armonía.
Palabra del Dia
Otros Mirando