Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !

Actualizado: 27 de mayo de 2025


33 Y estaba en la sinagoga un hombre que tenía un espíritu de un demonio inmundo, el cual exclamó a gran voz, 34 diciendo: Déjanos, ¿qué tenemos contigo Jesús Nazareno? ¿Has venido a destruirnos? Yo te conozco quién eres, el Santo de Dios. 35 Y Jesús le increpó, diciendo: Enmudece, y sal de él. Entonces el demonio, derribándole en medio, salió de él, y no le hizo daño alguno.

LEONIE. ¡Indudablemente...! ¡Pero es preferible que sea bonita...! LEONIE. ¡Bah! ¡Ya ves que tengo aquí a mi ahijado...! Que mande a Carmen, o a Irma. LA SIRVIENTA. ¡Es que el general quiere que seas ...! LEONIE. ¡Pues contéstale que he salido y déjanos en paz...! Este breve coloquio sume a Cirilo en una estupefacción inquieta. La sirvienta sale. CIRILO. ¿Tiene usted mucho trabajo?

Está bien profirió adquiriendo súbito aquel acento altivo, indiferente que la caracterizaba. Me complazco en ver que aunque vistes de aldeana y te has criado como si fueses tal, por tu rostro y tu figura manifiestas que has nacido señora y que mereces la posición en que te voy á colocar. Déjanos ahora un instante, pues tengo que hablar cosas secretas con los que hasta hoy has creído tus padres.

Lárgate a tu cocina, y déjanos en paz. Papitos se fue refunfuñando. ¿Qué traes por aquí? le preguntó Fortunata, que desde que la vio entrar, sentía palpitaciones muy fuertes. Pues nada... Estoy otra vez corriendo prendas, y aquí traigo unos mantones para que los vea esa tía pastelera... ¡Qué manera de hablar!

Es difícil, señorita, fijar la fecha de una reminiscencia. Más difícil es ser franco repuso ella entre el asombro de sus dos acompañantes. Yo lo soy siempre que es necesario. Quiere decir que en este caso no lo considera usted necesario, señor. ¿Y en qué consistiría mi falta de franqueza, señorita? dijo Ricardo envolviendo a Lorenzo en una mirada que parecía decir: «¡Ayúdame!», o «déjanos solos».

Manejé el incensario de lo lindo, aunque loando sus prendas morales con preferencia a las físicas, por parecerme de mejor gusto y no inspirar recelos. Cuando pasaban estas razones entre nosotros, apareció Joaquinita, diciéndonos con sonrisita forzada: Isabel, hija mía, nos acaparas todos los pollos. Déjanos siquiera alguno, por compasión.

11 Y dijeron a Moisés: ¿No había sepulcros en Egipto, que nos has sacado para que muramos en el desierto? ¿Por qué lo has hecho así con nosotros, que nos has sacado de Egipto? 12 ¿No es esto lo que te hablamos en Egipto, diciendo: Déjanos servir a los egipcios? Que mejor nos fuera servir a los egipcios, que morir nosotros en el desierto.

Palabra del Dia

santificación

Otros Mirando