Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !
Actualizado: 27 de mayo de 2025
Me fueron necesarios algo más que ruegos para determinar a los arrieros a conducirlos hasta la próxima aldea de Facatativá, a la que llegué tarde ya, encontrando en la puerta del hotel al secretario, que, a pesar de sus dos días de avance, no había conseguido aún el carruaje para llegar a Bogotá.
La Razón exhorta una vez más á los engañados á pensar en su salvación, y á embarcarse en el buque del arrepentimiento, el único que los librará de su ruina; pero el Alma nada quiere oir hasta que el mismo Jesucristo, dueño de este buque, se presenta acompañado de ángeles, y promete conducirlos á la bahía de la Salud, si llegan á arrepentirse.
Así trascendía ello, que mareaba. Del «lecho nupcial», tesoro inapreciable de maderas, bronces, lienzos, sedas, y brocados, y del simbólico boudoir, obra de hadas, que no de mortales, ¡Cristo mío, qué cosas se escribieron!... En fin, hasta para los carruajes ingleses, y para los caballos que habían de arrastrarlos, y para los levitones peludos de los cocheros que habían de conducirlos, hubo jarabe en las plumas, y sahumerios en los incensarios de aquellos ingenios de guardarropía.
La costumbre en que se han criado, su mucha sumisión y el miedo del azote son los que les hacen sujetar a ello; y así cuesta un sumo trabajo el juntarlos y conducirlos a las faenas. Para cada ocupación es necesario nombrar un cuidador; hay cuidadores de los tejedores, de los carpinteros, de los herreros, de los cocineros, de los sacristanes, de los carniceros y, en fin, de todos los oficios.
El capitán y el doctor Cornelius conferenciaron con los representantes de la Compañía, y por la noche se nos anunció que zarpábamos para China. Teníamos que recoger trabajadores coolies chinos, cerca de la colonia portuguesa de Macao, y conducirlos a América. Silva el portugués era el encargado de llevar a cabo estas negociaciones. Llegamos a las aguas de China.
El inglés se había olvidado de comer, para no enojar á la fortuna con su ausencia, ¡y este testarudo coronel venía á estorbarle con la maldita historia del duelo!... Firmó sin mirar; dió su palabra á los oficiales de que iría á buscarles en un automóvil para conducirlos á su castillo, y echó á correr inmediatamente, no sin antes decir á don Marcos con un tono agrio: Hasta las cuatro nada más.
Con el vientre oprimido por la correa nueva y el revólver al costado, caminaban en busca del ferrocarril que había de conducirlos al punto de concentración. Uno de sus hijos llevaba el sable oculto en una funda de tela. La mujer, apoyada en su brazo, triste y orgullosa al mismo tiempo, dirigía con amoroso susurro sus últimas recomendaciones.
Pero no irían nunca tan allá esos aires de muerte, porque no abundaban las almas de Lucifer capaces de conducirlos. Por de pronto, las cosas iban del mejor modo posible, y la marquesa reconocía que Dios era demasiado bueno con ella dándola lo que la daba por fin y remate de una vida como la suya.
Apeáronse todos; las damas pidieron un cuarto para arreglarse un poco; los caballeros tiraron cada cual por su lado; Tom Sickles y el prusiano recogieron el mail-coach y los caballos en una cochera próxima, para conducirlos a Madrid en el correo del día siguiente: faltaba para la llegada del tren una hora larga.
Permitióle Dios que se embarcaran, mas como sabe conducir al profeta Jonás a Nínive, por el camino de Tarsis, por más que opuesto, así supo desde la nave conducirlos a éstos a la prisión.
Palabra del Dia
Otros Mirando