United States or Armenia ? Vote for the TOP Country of the Week !


Los paraderos donde la diligencia se habia detenido sucesivamente eran tan detestables que yo no habia podido tomar alimento ninguno de provecho. Los garbanzos cocidos, las habas guisadas, el tocino y los chorizos me perseguian sin misericordia; y aunque algunos vasos de vino de Aranda y de Toro me habian confortado un poco, tenia la pena de no poder entretener el apetito con el cigarro por consideracion á la sobrina del buen cura. Ello es que yo tenia una hambre de primer órden, que se avivaba con cierto olorcillo á buen queso y exquisita conserva de melocoton que se escapaba de la maleta del cura.

Los del teatro de la Cruz llevaban el nombre de polacos, de su caudillo el P. Polaco, fraile descalzo, que pasaba entre los mosqueteros por muy inteligente en estas materias; los del Príncipe se apellidaban chorizos, y los de los Caños del Peral panduros, calificativos cuyo origen y explicación sería demasiado prolija é inoportuna.

Tanto madrugar, y tanto madrugar, y luego no hacedes ni medio cigarro, en el día, que mismo no sabedes menear los dedos, que mismo los tenedes que parecen chorizos, que mismo Dios os hizo torponas, que mismo.... Aquí ya la sorna y flema de las interpeladas tocaba a su fin, y respondían coléricas, pero entre dientes: ¿Y luego?

La señorita le tiraba bondadosamente de las orejas. Como vuelvas a traer aquí tales ascos..., verás, verás. Te he de colgar de la chimenea como a los chorizos, para que te ahúmes. Julián transigía con estas intimidades, mientras no sorprendió el secreto de otras harto menos inocentes.

Mientras la joven saboreaba aquellos manjares tributando un elogio a la cocinera a cada bocado, doña Águeda, satisfecha en lo más profundo de su vanidad, pasaba la mano pequeña y regordeta con dedos como chorizos llenos de sortijas, por el cabello ondeado entre rubio y castaño de la sobrinita de sus pecados, como ella decía. El artista y su obra se dedicaban mutuas sonrisas entre plato y plato.

Entonces no había más guerra civil que los famosos bandos y parcialidades de chorizos y polacos. No se sospechaba siquiera que podía haber más derecho que el de tirar varias cáscaras de melón a un morcillero, y el de acompañar la silla de manos de la Rita Luna, de vuelta a su casa desde el teatro, lloviendo dulces sobre ella.

Allí cerca, en la despensa, gallinas, pichones, anguilas monstruosas, jamones monumentales, morcillas blancas y morenas, chorizos purpurinos, en aparente desorden yacían amontonados o pendían de retorcidos ganchos de hierro, según su género. Aquella despensa devoraba lo más exquisito de la fauna y la flora comestibles de la provincia.

Más allá estaban los vendedores de sandías, voceando tras sus montones de verdes bombas; las mesas de comida barata, donde cenaban chorizos crudos y morcillas secas los soldados y los labradores; y al final, los barracones de espectáculos: El teatro mágico, La mujer gorda, Los perros sabios, con órganos a la puerta que hacían sonar una música extravagante, propia de una fiesta de caníbales.

Juana la Larga es dichosísima al ver la felicidad de su hija y de su yerno; adora a sus nietecillos, los consiente, los mima y les ríe todas las gracias, hasta las más pesadas y olorosas. Para que se críen robustos, después que los ha amamantado Juanita, Juana los desteta con chorizos, longaniza y asadura de cerdo. Su actividad culinaria no decae, a pesar de su edad.

Madre, tráiganos usted también pan y queso y algunos chorizos, porque éstos son amigos á quienes yo estimo por encima de todos los del llano. La tía Agustina los saludó cariñosamente. Cediendo á las instancias de su hijo, se presentó inmediatamente con un enorme pan de escanda tan oscuro como sabroso, y poco después un queso fresco y chorizos, fabricado todo de sus manos.