Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !
Actualizado: 26 de junio de 2025
Las campanas de la vieja iglesia de Raveloe repicaban alegremente anunciando que había terminado el oficio de la mañana. Por la puerta abovedada de la torre iban saliendo lentamente, detenidos por los saludos y preguntas amistosas, los más ricos feligreses que habían considerado aquella hermosa mañana del domingo muy apropiada para ir a la iglesia.
Como todos los que lo son, receló que, si abusaba de la ventaja de reanudar aquellas relaciones amistosas después de tanto tiempo, prolongando mucho el coloquio, no era difícil que en el alma de Rafaela se desbaratase o se disipase el hechizo de la novedad y que el gusto se convirtiese en enfado.
Sólo después de las comidas se formaban tertulias en el jardín de invierno; tertulias amistosas, sin rivalidades en el traje ni en las joyas, vistiendo cada cual a su gusto, como gentes preocupadas por una tarea extraordinaria y faltas de tiempo para pensar en el propio adorno. Sólo quedaban horas contadas de viaje: aquel día y parte del siguiente.
¿Y la señorita Romanot, que acaba de casarse a los treinta y ocho años?... ¿Y la de Ormont, cuya cuadragésimasexta primavera ha conocido al fin los triunfos del matrimonio?... ¿Dónde me las dejas? Son ejemplos que no hay que seguir. Considero sencillamente esas uniones tardías como asociaciones amistosas y no como matrimonios. ¡Bah! todo lo que se busca hoy es una asociación amistosa.
Después de admirarse de su propia capacidad para la política, sólo se reconocía deudor a D. Juan Fresco y a la copiosa turba de bermejinos que le siguieron en el día de la elección como a caudillo respetado. Durante todo este largo período electoral, las relaciones amistosas de doña Luz y del P. Enrique se fueron estrechando más cada día.
Parecía que toda la sociedad quería huir de aquella jaula en que estaba encerrado su mayor enemigo. Sólo una excepción existía en aquel aislamiento normal. Ya hemos dicho que don Elías fué amigo y servidor de una antigua é ilustre casa. Después de la ruina de los Porreños y Venegas, sólo quedaron tres individuos, tres dueñas venerables que conservaron relaciones amistosas con el realista.
Cesarina parece estar en su elemento, simpatizando con las gentes de este país, que son buenas y sencillas; nos colman de atenciones, que verdaderamente puedo calificar de amistosas. Felicítome mucho todos los días por este casamiento, que tantos disgustos me ha costado figurándome que había dificultades de verdadera monta para realizarlo.
Hasta las relaciones amistosas de doña Luz con el médico, con el cura y con D. Acisclo, eran invariables: estaban siempre en el mismo ser, sin crecer ni menguar. Sólo en las relaciones con doña Manolita hubo variación, aumentando la intensidad en el afecto. Partamos, pues, del instante en que crece y llega a su colmo esta amistad entre doña Luz y doña Manolita. Era una mañana de mayo.
No sabemos de una manera auténtica que fuesen de procedencia bizantina en su forma artística los objetos enviados á An-nasír por el emperador Oton y demas reyes del norte que con el Califa tuvieron comunicaciones amistosas; pero siendo sin disputa bizantino el estilo ornamental de todas las construcciones que hoy subsisten en Alemania, Francia y España, del tiempo de los Enriques, Conrados y demas monarcas de la casa de Sajonia, parece justo deducir que fuesen tambien neo-griegas las ideas en todos los ramos industriales de ostentacion y lujo.
Así se vieron restablecidas bajo el pie de la antigua intimidad, las relaciones amistosas de estos dos hombres.
Palabra del Dia
Otros Mirando