United States or Micronesia ? Vote for the TOP Country of the Week !


Fueron más arriba, abrazaron de una vez la extensa y sombría fachada de la gran casa solariega que, avezada a los golpes del huracán, dormía grave y desdeñosa bajo la intemperie. Contemplola larga, atentamente. Sus ojos brillaron con un fuego de gozo místico. Era la mirada del apóstol, ávida, tierna, clemente. Tal debió ser la expresión que reflejaron los ojos de San Pedro a la vista de Roma.

Cada uno tiene su modo de hacerla dijo ella con imperceptible sonrisa. Confesad que la mía sería singular. Púsose a jugar con mano febril con algunos objetos que había sobre la mesa; sus ojos se detuvieron en una fotografía del pequeño Roberto; tomola y contemplola atentamente. Es lindo mi hijo, ¿no es verdad? ¡Precioso! ¿Por qué lo tomasteis en vuestros brazos cuando yo entré?

La dulce voz de la niña le hizo estremecer. Contemplóla con un respeto y una sumisión que no le había inspirado jamás, y apremiado por su mirada interrogadora, replicó: Está muy bien el padrino, querida. Ella le tendió la frente esperando un beso, y el pobre muchacho se inclinó y le besó la mano con noble acatamiento.

Contemplola largo tiempo, levantó indignada su cabecita, y la desviación de sus ojos aterciopelados se acentuó. Luego volviose, y lanzando una carcajada, despreocupada y resuelta corrió hacia el armario, donde colgaban sus preciosos vestidos, y los inspeccionó con visible excitación.

Isidora vestía una bata azul de corte elegantísimo. Acababa de peinarse y su cabeza era una maravilla. Nadie que la viese, sin saber quién era, podría dudar que pertenecía a la clase más elevada de la sociedad. Contemplola D. José, más que con amor, con veneración, con fanatismo, como el salvaje contempla el fetiche, y poco faltó para que se la hincara delante.