Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !
Actualizado: 22 de junio de 2025
Yo deseaba muchísimo conocer en la intimidad el tipo del Frances distinguido de provincia, porque en lo general no estaba muy pagado del hombre de mundo parisiense. Queria instruirme tambien en las cosas relativas á la vida provincial en Francia, viajar asociado á personas inteligentes y observar la manera como los Franceses juzgan á España.
Pero me tranquilizaron papá y unos señores muy buenos que andan aquí con nosotros, asegurándome que aquello pasaría en media semana, y que en otra media quedaría pagado en lo que valía. »Y así sucedió afortunadamente.
Pero, además, poseía un fondo de rectitud, un alma justiciera que mantenía viva la llama de la ofensa. Los desprecios con que Velázquez había pagado su amor tierno y desinteresado le causaban cada día mayor indignación. Había llegado á aborrecerle y lo confesaba tranquilamente con la sinceridad que la caracterizaba. No era esto, sin embargo, lo que más preocupaba á Paca.
Necesita dinero para la primera expedición a Tucumán, y pide al tesorero de la Casa de la Moneda 8.000 pesos por cuenta de sus acciones, que no había pagado; en Tucumán pide 25.000 pesos para pagar a sus soldados, que nada reciben, y más tarde pasa la cuenta de 18.000 pesos a Dorrego para que le abone los costos de la expedición que había hecho por orden del gobernador de Buenos Aires.
Cuando estés libre, sube á las cocinas; pregunta por el galopín Aldaba, y dile de mi parte que te lleve á casa de la señora María, la mujer del escudero Melchor... no te olvides. No me olvidaré. Allí tienes preparado y pagado el hospedaje. Es lo último que tengo que decirte. Conque vamos, hijo, vamos.
De repente tropezó con Sandy. Un agudo grito de inconsciente terror se escapó de aquel pecho femenino, pero una vez hubo pagado este tributo a la física debilidad, volviose más que atrevida, y se paró un momento, a seis pies, por lo menos, de distancia del monstruo tendido, recogiendo con la mano sus blancas faldas, en actitud de huir.
Le invitaron a algunos salones de Montmartre donde los hombres más elegantes y más respetables van algunas veces en buena compañía a buscar la mala. Encontró aquí y acullá muebles que había comprado con su dinero; miró la hora en relojes cuya factura había pagado.
No, hijo, no; ¡si lo ha pagado tu madre! veintiocho realazos... ¡y luego vociferan que el agua de Vichy es farsa moderna y que la hidroterapia sale cara!
Otros, simples labriegos, españoles ó italianos, habían atravesado el Atlántico atraídos por la estupenda novedad de ganar seis pesos diarios por el mismo trabajo que en su país era pagado con unos cuantos céntimos.
Don Eleazar se ha portado bien conmigo; me ha pagado religiosamente mis sueldos y ha tenido el buen gusto de no imponerme de sus negocios. ¿Y qué va usted a hacer? No lo sé, pero mañana lo sabré. Desde luego disponga usted de mi cuarto: ¡tenemos que separarnos!
Palabra del Dia
Otros Mirando