Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !

Actualizado: 15 de junio de 2025


Sobre lo que después sucedió hasta la pérdida del fuerte, porque no cosa sino de oídas, no me paresce apunctar ni tractar aquí dello. D. Álvaro de Sande.

22 Entonces Félix, oídas estas cosas, les puso dilación, diciendo: Al estar más informado de este camino, cuando descendiere el tribuno Lisias acabaré de conocer de vuestro negocio. 23 Y mandó al centurión que Pablo fuese guardado, y aliviado de las prisiones; y que no vedase a ninguno de los suyos servirle, o venir a él.

Únicamente sabían hablar de los incidentes de su instalación; repetían las noticias oídas á los ministros, con los que vivían familiarmente; mencionaban con aire misterioso la gran batalla que había empezado á desarrollarse desde las cercanías de París hasta Verdún.

19 Acuérdate de para bien, Dios mío, y de todo lo que hice a este pueblo. Mas ellos habían pensado hacerme mal. 7 y que has puesto profetas que prediquen de ti en Jerusalén, diciendo: ¡Rey en Judá! Y ahora serán oídas del rey las tales palabras; ven, por tanto, y consultemos juntos. 8 Entonces envié yo a decirle: No hay tal cosa como dices, sino que de tu corazón lo inventas.

Los había de ellos que llevaban dos meses en la escuela y abrían desmesuradamente los ojos y se rascaban el cogote sin entender lo que el maestro quería decirles con unas palabras jamás oídas en su barraca. ¡Cómo sufría el pobre señor! ¡

El P. San Agustin y el P. Colin escribieron de oidas; porqué, sino, no es posible que digeran lo que dicen. Chirino mismo no se atreve

Pues estas cosas, tan estúpidas de puro vulgares, las hacía y decía todos los días, y eran vistas y oídas de todos; a veces, Esteven perdía la paciencia, y entonces se armaban tremolinas escandalosas: que , que yo, que si esto, que si lo otro, eres así, eres asá; escarbaban en el pasado de ambos, para sacar toda la porquería y embadurnarse sin piedad la cara mutuamente.

Estaba en frecuente correspondencia con su hijo el notario. De tarde en tarde llegaba una carta del menor, del predilecto, desde remotos países que sólo conocía de oídas el viejo navegante mediterráneo. Y las largas inercias á la sombra de su emparrado, frente al mar azul y luminoso, las entretenía construyendo sus pequeños buques. Todos ellos eran fragatas de gran porte y atrevido velamen.

A fines del siglo XVII, los españoles eran casi desconocidos en Alemania, y Morhof, en su Polyhistor , sólo nombra á Lope de Vega entre todos los poetas castellanos, dando á entender, en sus observaciones acerca del mismo, que habla sólo de oídas.

González, sin perder de vista la preparación de las mesas, hablaba á unos parroquianos de su establecimiento, mostrándoles el río. Era propicia la ocasión para repetir, con una gravedad doctoral, muchas cosas oídas á su compatriota Robledo. Los indios habían dado á este río su nombre de Negro por los sufrimientos que les costaba remontarlo, á causa de su rápida corriente.

Palabra del Dia

metropolitanos

Otros Mirando