United States or Nigeria ? Vote for the TOP Country of the Week !


La marquesa, por vecindades en la mesa redonda del hotel en que se hospedaba, había trabado amistad con una señora de buen aire, la cual señora tenía dos hijas muy guapas: la una y las otras eran, además, muy discretas y muy distinguidas de porte. Tampoco eran de Madrid condición muy del gusto de la marquesa ; pero sin ser de Madrid se puede ser guapo, y hasta listo y elegante.

Pocos minutos después, el señor de Castelnau entró en el salón, abrazó afectuosamente a su tío y saludó a las dos señoras con respeto. Aparentaba unos veinticinco años. Era alto, bien formado, de porte distinguido; en una palabra, un gallardo mozo; y, lo que vale más, parecía ignorarlo, porque se ocupaba siempre de los demás y nunca de mismo.

¿Y por qué has de dármelo, ajo? ¿para pagarme el porte de la carta? no me da la gana: yo te he servido siempre, pues es mi deber de tío, y de tío que te quiere, Quilito; y los tuyos habéis compadecido y tratado bien a Agapo: no os habéis burlado de su desgracia, ni avergonzado de su parentesco, como los otros.

Mas ¡oh cálculo vil!..... Sólo ¡provecho Buscando en el amor, franco de porte, Abren á estos gaznápiros el lecho, Y, sin que el hijo luego les importe, Anuncian leche fresca en el DIARIO, A las bellas madrastras de la corte! Pero volvamos al baile del día de San Roque.

Había, por último, en el porte y continente de D. Luis aquel indescriptible sello de distinción y de hidalguía que parece, aunque no lo sea siempre, privativa calidad y exclusivo privilegio de las familias aristocráticas. Al ver a D. Luis, era menester confesar que Pepita Jiménez sabía de estética por instinto.

«Bien merecido me lo tengo declaró en un arranque de dolor combinado con la rabia , porque los dos hemos sido malos; pero yo he sido más mala que ... yo dejo tamañitas a todas... ¡Dios, con la que yo hice!, ¡portarme como me porté con aquella familia! me decías que no era nada, cuando yo me ponía triste... pensando en lo que había hecho, , y te reías... te reías».

Dijo, miró con ira á los zumbones que le rodeaban, y rompió el cerco, bamboleándose al andar, como buque de mucho porte que toma la barra seguro de llegar al puerto.

Cuando Fernanda entró en el gabinete alzó los ojos y clavó en ella una mirada penetrante que la abrazó de la cabeza a los pies. Ni la hermosura ni el porte, singularmente elegante, de la joven debieron dejarle satisfecho, porque la convirtió inmediatamente a los naipes y exclamó con insolente protección: ¡Hola, pequeña! ¿Eres ? ¿Cuándo has llegado?

»En aquel instante le avisaron que un hombre mal vestido deseaba hablarle y le esperaba en el parque. »Algunos momentos después, desde las ventanas del salón los vi pasar por una calle de árboles de las más lejanas. No pude distinguir el rostro del extranjero, cuyo porte no me pareció completamente desconocido, agolpándose a mi imaginación ideas y recuerdos confusos.

Las cuadernas eran sencillas en las naos de poco porte; la clara próximamente igual al ancho de una de ellas; el macizado se hacía algunas veces con mampostería para que sirviera de lastre fijo. Se expresa la distribución de tracas en el pliego de dimensiones. Las costuras eran sencillas y en muchas naves se cubrían con tapa-juntas de tabla.