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Actualizado: 27 de junio de 2025


Yo, que observo cuanto veo, he tenido siempre la costumbre de asociar, hasta un extremo exagerado, ideas con imágenes, cosas con personas, aunque pertenezcan a las más inasociables categorías.

Así, por ejemplo, Mosheim dice: «El candor y la imparcialidad me obligan á confesar que los adversarios de los jesuítas, al mostrar la torpeza y negrura de varias de sus máximas y opiniones, han ido más allá de lo que debían, y han exagerado las cosas para abrir más extenso campo á su celo y á su elocuencia.

Y como esto llovía sobre mojado, porque hacía ya bastantes días que la encontraba despegada, distraída, la picadura era más viva. Castro no estaba enamorado de la esposa de Osorio. Era incapaz de enamorarse. Pero tenía una idea extraordinaria de sus dotes de conquistador y, como consecuencia, un amor propio exagerado.

Si es esto un cumplimiento respondió enfáticamente Eloísa , es tan exagerado que más bien parece burla. Ese señor italiano dijo Rita es el que ha pedido canciones españolas. Es aficionado y lo entiende; conque es prueba de que merecen ser oídas.

Condena Vd. como debe el sentimentalismo exagerado y la propensión a enternecerme y a llorar por motivos pueriles de que le dije padecía a veces; pero esta afeminada pasión de ánimo, ya que existe en , importando desecharla, celebra Vd. que no se mezcle con la oración y la meditación y las contamine.

Lo bueno es que tal modo de pensar es de tu edad, y ¡a Dios gracias! aun no te ha llegado el tiempo de exclamar con el Eclesiastés: ¡Todo es vanidad y nada más que vanidad! ¡Qué exagerado es ese Eclesiastés! Y luego es tan viejo. Se me ocurre que sus ideas han de andar fuera de moda. Vamos, vamos, callémonos.

Pero la misma idea de la elegancia aristocrática del traje le infundió un sentimiento algo exagerado del decoro y compostura que debía tener quien le llevaba puesto. Por desgracia, en la primera visita que hizo Don Diego á una hidalga viuda, que tenía dos hijas doncellas, se habló del niño Fadrique y de lo crecido que estaba, y del talento que tenía para bailar el bolero.

Su carácter frío, su ingenio reconocido y el cinismo con que se expresaba logró dominarlas. Hasta el exagerado acento extranjero contribuía a dar más gracia a sus frases insolentes en el fondo y correctas en la forma.

Su inteligencia, que era muy perspicaz y cultivada del modo que hemos dicho, prestaba más fuerza á aquel sentimiento exagerado; y el consorcio extraño de sus facultades intelectuales con su gran pasión, unido á su trato indomable, hacía de él uno de esos seres monstruosos, que la observación superficial califica ligeramente de este modo: un loco.

Este exceso de reflexión y este examen de conciencia exagerado son quizá una costumbre mórbida, inevitable en un espíritu de una gran sensibilidad moral, privado de su fuente legítima de actividad exterior y no pudiendo entregarse a los cuidados maternales reclamados por su afecto, inevitable en una mujer de noble corazón cuando no tiene hijos y su condición es muy limitada. «Puedo hacer tan poco; ¿lo habré hecho enteramente bienTal era el pensamiento que volvía perpetuamente.

Palabra del Dia

vorsado

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