Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !
Actualizado: 27 de junio de 2025
Sus funciones en el palacio del primer príncipe de la sangre, atraían a su alrededor muchos personajes célebres de la época. El mismo Voltaire, durante su triunfal y último viaje a París, hizo una visita de atención a los jóvenes príncipes.
Verdad es que conocía la historia de varios célebres misioneros cuyas virtudes honraban al cristianismo; pero siempre encontraba en su carácter un lunar que me hacía perder en parte mi entusiasta veneración hacia ellos. Sólo había podido, pues, admirar en toda su plenitud a los personajes ideales que he mencionado.
Leía con avidez las causas célebres y reservaba toda su compasión para los criminales en capilla.
Ambos se abrazaron, y algunos aduladores del Padre de los Maestros sintieron que no estuviesen presentes los fotógrafos de los periódicos para retratar el abrazo de los dos genios más célebres del país.
Trataremos en lugar oportuno de este punto, y con la prolijidad que merece, después de historiar parte de la literatura dramática de esta época. Entonces conoceremos la nueva forma, que toma el teatro bajo Felipe IV, y su enlace con los anteriores, y ésta será también ocasión de comunicar á los lectores los datos, que poseemos, acerca de los más célebres actores del tiempo de Lope de Vega.
El tribuno hizo un gesto despectivo al oir el nombre del coloso. Su opinión sobre él estaba formada, y todo lo referente á su persona lo tenía guardado en una carpeta llena de papeles puesta sobre una mesa próxima. Allí estaban los célebres datos estadísticos sobre las enormes cantidades de materias alimenticias que llevaba devoradas el intruso.
Porque son dos los estilos que se dividen el siglo XVI en España: el primero es el plateresco, formado y cultivado casi esclusivamente por artistas españoles bajo el reinado de Cárlos V, el cual se perpetúa hasta dentro del reinado de Felipe II, y al que se deben, entre muchos edificios justamente célebres, el bellísimo claustro del monasterio de Sta.
Había amado y había sufrido como todos los que batallan por un ideal. Sabía lo que era forcejear á zarpazos con la Suerte, para hacerla suya y fecundarla con ardorosa violación. Había llegado como los políticos célebres ó los grandes artistas, que empiezan su carrera desde abajo, conociendo la miseria y bordeando continuamente el peligro.
Solo de un modo podriais ser más desgraciados que los habitantes de esta Babilonia, que me aturde: teniéndoles envidia. =Dia sétimo=. Casa de Ciudad, arco del Triunfo, Obelisco. Mis queridos lectores, ayer os he hablado de las Casas Consistoriales y del arco del Triunfo, y os debo algunas palabras sobre ambos monumentos, representantes de célebres y poderosas tradiciones políticas de este país.
Siempre le están hablando a uno, señores, del lecho de campaña de los hombres célebres... esos que están expuestos en los palacios y museos patrióticos; y, cuando los visitantes pasan por delante de ellos, no dejan nunca de exclamar, alzando los brazos al cielo: «¡Qué fuerza de voluntad! ¡qué sencillez espartana!...» ¡Farsa, señores, pura farsa!
Palabra del Dia
Otros Mirando