United States or Guinea-Bissau ? Vote for the TOP Country of the Week !


Andad, hermano, mucho de enhoramala para vos y para quien acá os trujo, y tened cuenta con vuestro jumento, que las dueñas desta casa no estamos acostumbradas a semejantes haciendas. -Pues en verdad -respondió Sancho- que he oído yo decir a mi señor, que es zahorí de las historias, contando aquella de Lanzarote, cuando de Bretaña vino, que damas curaban dél, y dueñas del su rocino;

Ya sabía ella que todo aquello era mojama y conversación de Puerta de Tierra. ¡Pues no faltaba más que dos gachós tan serranos se juntasen y se apartasen como dos perros callejeros! Andad, hijos, que las piedras de la calle os irán echando bendiciones. Soledad, no consientas más en la vida que ese desaborío te regale ligas. Ya te anuncié que habíais de reñir...

Pero si en la voluntad, Como en la casa, se vive, Esta el alma os apercibe Y os da a vos su libertad. Ya sois, señor bencerraje, De Jarifa: andad con Dios. ABIND. Ella y yo somos de vos Con justo pleito homenaje. JARIFA. Señor, no me desechéis, Que quiero yo ser muy vuestra. NARV. Sujeta el alma se os muestra Para que vos la mandéis. Y perdonad si no había Preguntado cómo estáis.

Trujéronsele, y, en viéndole Sancho, le dijo: -Dadme, buen hombre, ese báculo, que le he menester. -De muy buena gana -respondió el viejo-: hele aquí, señor. Y púsosele en la mano. Tomóle Sancho, y, dándosele al otro viejo, le dijo: -Andad con Dios, que ya vais pagado. ¿Yo, señor? -respondió el viejo-. Pues, ¿vale esta cañaheja diez escudos de oro?

8 Ahora pues, tomaos siete becerros y siete carneros, y andad a mi siervo Job, y ofreced holocausto por vosotros, y mi siervo Job orará por vosotros; porque solamente por su respeto no os trataré afrentosamente, por cuanto no habéis hablado por con rectitud, como mi siervo Job.

18 Casadas, estad sujetas a vuestros propios maridos, como conviene en el Señor. 21 Padres, no irritéis a vuestros hijos, para que no se vuelvan de poco ánimo. 24 estando ciertos que del Señor recibiréis el salario de herencia, porque al Señor Cristo servís. 4 para que lo manifieste como me conviene hablar. 5 Andad en sabiduría para con los extraños, ganando la ocasión.

Pero Soledad, en vez de responderle, se dirigió en voz alta y tono jocoso á sus amigas, que marchaban delante. Andad más vivito, hijas, que llevamos paso de procesión. ¿Queréis pasar la noche al fresco? Cayéronsele al guapo las alas del corazón. En su vida se había sentido tan triste. Aún tuvo fuerzas para exclamar: Vamos, Soledad, olvida mis faltas.

Espantóse la mujer y fuese cabizbaja y mal contenta, y el gobernador dijo al hombre: -Buen hombre, andad con Dios a vuestro lugar con vuestro dinero, y de aquí adelante, si no le queréis perder, procurad que no os venga en voluntad de yogar con nadie.

-Hermano -dijo don Antonio-, seguid vuestro camino, y no deis consejos a quien no os los pide. El señor don Quijote de la Mancha es muy cuerdo, y nosotros, que le acompañamos, no somos necios; la virtud se ha de honrar dondequiera que se hallare, y andad en hora mala, y no os metáis donde no os llaman.

Andad, payas, y si no tenéis gana de jartaros de cosas buenas, tomad algo de lo que el señó os . ¡Pues, poquitas veces que me orsequió a el señó marqués, el papá de este sol resplandesiente que aquí está! Y decía esto señalando a la Marquesita, que examinaba a algunas de aquellas jóvenes, como si quisiera adivinar su hermosura debajo de las ropas astrosas.