Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !
Actualizado: 29 de mayo de 2025
Pasaron horas y más horas, que por lo largas parecían noches empalmadas, sin días que las separasen, y la pluma acabó sus rezos y los volvió á empezar, y acabados de nuevo, y agotado todo el repertorio de oraciones que sabía, dijo otras que sacaba de su cabeza, hasta que al fin, no ocurriéndosele nada, aburrida de aburrirse, se dejó decir: «Vientecillo, me alegro de que no te hayas ido.
Acabó de repasarles las espaldas, volvió, y llevóme a su casa, donde me apeé y comimos. Tenía mi buen tío su alojamiento junto al matadero, en casa un aguador.
¿No lo decia yo?.... el correo de hoy!.... La una es de N. su corresponsal en la plaza N. Vamos, cabalmente allí tenia sus aprietos. Dice así: «Muy Sr. mio: en este momento acabo de salir de la reunion consabida. No faltaban renitentes, pero al fin apoyado de los amigos N N, he conseguido que todo el mundo entrase en razon.
Acabó de repasarles las espaldas, volvió y llevóme a su casa, donde me apeé y comimos. Libro Segundo: Capítulo IV: Del hospedaje de su tío, y visitas; la cobranza de su hacienda y vuelta a la corte. Tenía mi buen tío su alojamiento junto al matadero, en casa de un aguador.
Empezó el 17 de Noviembre, y se acabó el 16 de Febrero, cuyos meses corresponden á los de Junio, Julio y Agosto en el otro hemisferio, y por consiguiente á la estacion mas cálida del año.
54 Y fue, [que] cuando acabó Salomón de orar al SE
El banderillero acabó por marcharse, huyendo de la señora Angustias, que, a impulsos de la indignación, mostraba la misma ligereza de lengua de los tiempos en que trabajaba en la Fábrica de Tabacos. Proponíase no volver más a la casa de su maestro. Encontraba a Gallardo en la calle.
Quien más murmuraba contra tales visitas era don Juan, el hermano austero, huraño y de pulcra rectitud; pero sus quejas fueron, recibidas tan acremente, que acabó jurando no volver a poner los pies en aquella casa. Quedó el médico dueño del campo.
Pero acabó por creer en un olvido del profesor, y la intranquilidad le hizo acudir á la cita mucho antes. Pasó más de tres horas en ansiosa espera, vagando por las calles inmediatas á la iglesia, inmovilizándose en las esquinas, cambiando de sitio al notar la curiosidad de los transeuntes.
Si estás contenta, calla y no respondas, y tu callar es señal cierta que consientes. Mi padre acababa de morir en guerra de frontera, y mis dos hermanos se holgaban de mi buena estrella... ¡Todo acabó para mí!
Palabra del Dia
Otros Mirando