United States or Cabo Verde ? Vote for the TOP Country of the Week !


Nélida, ¡por Dios! baja de la ventana. Pero ella reía de su miedo, segura al mismo tiempo de la fuerza con que la mantenían sus brazos. «¡Ah... ah... ah!» Y echaba el cuerpo atrás, en el vacío, con tal ímpetu, que Ojeda hubo de hacer grandes esfuerzos para sostenerla. Di que si yo cayese te echarías de cabeza para salvarme... Di que morirías por tu nena...

Conozco bien tu genio; eres impetuoso en extremo, y tal vez antes de reflexionar sobre mis palabras y equivocándote acerca de su sentido, te inflamarías como una pólvora, lo echarías todo a rodar y me asustarías horriblemente como en la noche que celebramos el santo de mamá. Por eso, después de vacilar mucho, me resuelvo a decírtelo por escrito y no de palabra.

Pues mira, por lo pronto no irás a casa de Calderón sino cada ocho o diez días.... Iremos juntos o nos encontraremos allá. No debes quedar solo: en un momento de debilidad echarías a perder toda la obra. Hablarás poco con Esperanza y mucho con las chicas que allí estén.

Pero te echarías al agua detrás de , ¿no es cierto, mi viejo?... Vendrías a hacerle compañía a tu nena en medio del mar, y nadaríamos juntos hasta que nos buscasen... Y si no nos buscaban, nos ahogaríamos juntos... ¡así!... ¡bien juntitos! Con la excitación del peligro se abrazaba a él fuertemente, tirando hacia afuera, como si en realidad desease caer de la ventana arrastrando a su amante.

El empleado preguntaba al Machaco, y éste contestó, sonriendo con sencillez infantil: Con ésta veintitrés. -Te han traído por un portamonedas de señora, ¿verdad?... Le darías tirón y echarías a correr. No, señor dijo el Machaco poniéndose serio . Lo saqué de dentro del bolsillo. Yo ya no hago esas cosas.