Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !

Actualizado: 19 de septiembre de 2025


Y no holgué yo menos de esta feria Salir, que me cabia mucha parte, Y así en el Concilio mi miseria Gasté con mi pequeña industria y arte: Por me en pobreza, y gran laceria, Mas nunca jamas pude yo olvidarte España, dulce amiga, cuyo hipo, Me trajo sin sosiego, y el Filipo.

Gallardo escuchaba complacido estas noticias, pero al mismo tiempo movía la cabeza con expresión de duda. ¡Cuándo volvería a verla!... ¿La vería alguna vez?... ¡Ay, aquella mujer caprichosa, que había huido sin motivo, a impulsos de su extraño carácter! Lo que debes hacer decía el apoderado es olvidarte del mujerío, para pensar un poco en los negocios.

Cuando cerré mi carta, estaba yo tranquilo. En ella le hablé francamente: «¿A qué pensar en eso, Linilla mía? ¡Te amo, te adoro! ¿Qué motivos tienes para dudar de mi fidelidad? Me ofendes cuando dices que tarde o temprano he de olvidarte. Angelina: eres cruel conmigo, y no temes lastimar mi corazón. ¿No dices que me amas? Pues entonces, ¿por qué dudas así de mi cariño?

LEONOR. No, no tengo nada ... mas temo vuestro furor. ¿Quién dijo, Manrique, quién, que yo olvidarte pudiera infiel, y tu amor vendiera, tu amor, que es sólo mi bien! ¿Mis lágrimas no bastaron a arrancar de tu razón esa funesta ilusión? MANRIQUE. Harto tiempo me engañaron. Demasiado te creí mientras tierna me halagabas y pérfida me engañabas. ¡Qué necio, qué necio fui!

Si supiera que aún existo para adorarla... No, no... Ya olvidarte debo yo, esposa de Jesucristo... RUIZ. ¿Qué hacéis? Callad... MANRIQUE. Loco estoy... ¿Y cómo no estarlo ¡ay cielo! si, infelice, mi consuelo pierdo y mis delicias hoy? No los perderé; Ruiz, déjame. RUIZ. ¿Qué vais a hacer? MANRIQUE. Pudiérala acaso ver... con esto fuera feliz. RUIZ. Aquí el locutorio está. MANRIQUE. Vete.

Pero al mismo tiempo pensaba con miedo en las horas de angustia que le esperaban allá en los altos hornos, si se retiraba llevando sobre el alma el peso de su decepción. ¡Cuando menos, dime que me querrás siempre! dijo cogiendo una mano de Pepita, como si hubiese olvidado la protesta de antes. ¡Dime que, ocurra lo que ocurra, no me olvidarás! ; te quiero: no podré olvidarte nunca.

Palabra del Dia

embaucando

Otros Mirando