Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !
Actualizado: 23 de junio de 2025
Los cuadros tenían a un lado cartelas blancas con los mismos remates plegados de un escudo de armas, y en ellas, escrito en defectuosas mayúsculas, el relato del suceso: encuentros victoriosos con galeras del Gran Turco o con piratas pisanos, genoveses y vizcaínos; guerras en Cerdeña; asaltos de Bujía y de Tedeliz; y en todas estas empresas era un Febrer el que dirigía a los combatientes o se hacía notar por su heroísmo, descollando sobre todos el comendador don Príamo, héroe endiablado, burlón y poco religioso, que había sido la gloria y la vergüenza de la casa.
Unas fueron a Marruecos y poblaron un gran barrio de la ciudad de Fez. Otras emigraron más lejos y se establecieron en Egipto. Abu Hafáz, entre tanto, con sus naves, y con los más valerosos entre los forajidos, se hizo pirata. Aquí entraba en mi plan una serie de aventuras y de incursiones en la Provenza, en Cerdeña, en las costas de Calabria y en otras comarcas.
La plaza del Palacio Viejo, detras del cual reside el rey de Cerdeña en un edificio que llaman palacio, por equivocacion sin duda, es grande y despejada como todas las de la ciudad: á ella desembocan las calles mas elegantes, donde el comercio tiene sus lujosas tiendas .
Cerdeña tiene menos policía que Nápoles, y Nápoles es más criminal que Cerdeña en una proporcion fabulosa.
A Luis de Cerdeña 5625 mrs. por la mitad de 30 ducados que con él se concertó el carro de las Cortes de la Muerte. A Lorenzo Nuñez por la mitad de 20 ducados que con él se concertó la danza de los monstruos. A Melchor de San Miguel 3400 mrs. por la mitad de 200 reales que con él se concertó la danza de los galanes.
Formaban a esta sazón el Sagrado Tribunal de esta Inquisición de Mallorca: El Muy Ilustre Señor Licenciado D. José Hualte, Catedrático propietario de Digesto viejo en la Universidad de Huesca, Fiscal e Inquisidor más antiguo que fue en el Santo Oficio de la Inquisición de Cerdeña, y aquí Inquisidor Apostólico más antiguo.
Y he aquí la misma Elda, que los iberos, grandes poetas, llamaron Idaella, de Daellos, que en nuestra lengua es casa de regalo. El palacio vetusto de los Coloma, virreyes de Cerdeña, muestra en lo alto sus dorados muros ruinosos; abajo, el pueblo se extiende en tortuosas callejas apretadas. El Vinalapó corre en lo hondo.
M. de Vignet, el amigo de mi hijo, ha estado aquí unos días, acaba de ser llamado a París por el embajador de Cerdeña, marqués de Alfieri, a quien Alfonso conoce muchísimo. Esto es buen augurio para el porvenir diplomático de este joven, quien empezaba ya a descorazonarse. ¡Ah! ¡cómo quisiera yo ver a mi hijo entrar pronto en una carrera tan digna de él!
Kaledine, tal vez por vivir en Nápoles, insistió con predilección en la parte mediterránea comprendida entre la Cerdeña, la Italia del Sur y la Sicilia, ó sea lo que los antiguos habían llamado el mar Tirreno... ¿Conocía el capitán Ferragut las islas poco frecuentadas y casi perdidas enfrente de Sicilia? Yo lo conozco todo afirmó éste con orgullo.
Sea como sea, para mí es evidente que antes de que penetraran en España los celtas, los fenicios, los griegos y otras gentes, hubo en España un pueblo civilizado, que llamaremos los iberos. Este pueblo se extendía por toda nuestra península, y aun tenía colonias en Cerdeña, en Italia y en otras partes, como Guillermo Humbolt lo ha demostrado. Eran vascos y hablaban la lengua euskara.
Palabra del Dia
Otros Mirando