United States or Northern Mariana Islands ? Vote for the TOP Country of the Week !


Entrar en las aldeas a caballo, la boina sobre los ojos, el sable al cinto, mientras las campanas tocan en la iglesia.

Dos jóvenes caballeros, que regresan de las campañas de Flandes, han perdido al juego toda su fortuna. Acuérdanse en este apuro de una carta de recomendación, que les ha proporcionado uno de sus compañeros del ejército para una hermana de éste, viuda rica y domiciliada en Madrid.

Yo tengo unas amigas que cantan en golpes graves y metálicos por la mañana; que sollozan por la tarde en un canto largo y plañidero de despedida. Vivo al lado de una iglesia. Y estas amigas son las campanas. La iglesia es vieja, con las paredes amarillas y desconchadas, con una torre puntiaguda.

Ella le ha de dar la mano al puerto de San José con sus frutos y ganados, y como por escala, han de salir estos auxilios para las demas poblaciones, descubriendo los caminos que transitan los indios, sus aguadas, campañas y montes hasta el Estrecho: pues de todos hay noticia, y solo ha faltado en el anterior ministerio el calor que se necesita en semejantes casos, para que en el tiempo que ambos Super-intendentes han estado en sus respectivas comisiones, hubieran reconocido la parte mas principal de este continente.

Las plantas del jardincillo se balanceaban rumorosas. Las adelfas columpiaban sus tallos flexibles; los floripondios mecían en la obscuridad sus campanas de raso, y en la espléndida copa de un naranjo las primeras gotas, gruesas y resonantes, caían con ímpetu extraordinario, precursoras de un largo aguacero. Estaba yo en la casa de los míos. Pero ¡ay! qué triste aparecía ante mis ojos.

Todos los domingos y días festivos del año se anuncia, la víspera a las oraciones, con repique de campanas, que se repiten al alba; y al salir el sol, o poco después, se da el primer repique para convocar la gente a la iglesia, repitiendo otros dos con intermisión de seis u ocho minutos entre uno y otro.

Al terminar la misa, el órgano comenzó a rugir una marcha desordenada y ruidosa, algo así como una danza salvaje, mientras se ordenaba la procesión. Fuera de la catedral sonaban las campanas.

No me parece mal remedio ése dijo Cortado ; pero advierta vuesa merced no se le olviden las señas de la bolsa, ni la cantidad puntualmente del dinero que va en ella; que si yerra en un ardite, no parecerá en días del mundo, y esto le doy por hado. No hay que temer deso respondió el sacristán ; que lo tengo más en la memoria que el tocar de las campanas: no me erraré en un átomo.

Las ciudades del norte y del oriente de España te enviaron sus mas hermosas cautivas y espléndidos tesoros; Santiago de Compostela te mandó enormes campanas que sirvieron de lámparas para tus mezquitas; el Africa coronó tus sienes con las mejores palmas del Desierto. Fuiste la reina de las naciones, fuiste la luz del mundo.

Es muy notable la portada, cuyos bajos relieves representan el juicio final, cuadro tan favorito de las iglesias de la edad média. El juego de campanas de la torre, de muy variadas sinfonías, es acaso el mejor de Suiza.