Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !

Actualizado: 16 de octubre de 2025


Hermosa dama, la vida no carecerá jamás de poesía para los que tengan la dicha de ver a usted. Este cumplimiento fue disparado con una tal ampulosidad de galantería burguesa, que toda la asamblea aplaudió. El señor Domet se ruborizó hasta el blanco de los ojos y miró las puntas de sus zapatos. Pero la señora Chermidy le llamó de nuevo a la cuestión.

Ella bailaba la danza de moda, frecuentando los «té-tango» donde era admirado Desnoyers. ¡Verse de pronto al lado de este hombre célebre é interesante que se disputaban las mujeres!... Para que no la creyese una burguesa igual á las otras contertulias del senador, habló de sus costureros, todos de la rue de la Paix, declarando gravemente que una mujer que se respeta no puede salir á la calle con un vestido de menos de ochocientos francos, y que el sombrero de mil, objeto de asombro hace pocos años, era ahora una vulgaridad.

Aborrezco a los miserables que, por no turbar la paz burguesa del matrimonio, abandonan los hijos que tuvieron fuera de su casa. La paternidad es la más noble de las funciones animales, pero las bestias tienen más valor y más dignidad que el hombre para cumplirla.

LA CHOUTE. ¡...! ¡Lo tuve...! ¿Qué quieres...? ¡Comprendía claramente que en él no llegaría a ser nada...! No me gustaba el oficio, ni los compañeros; no se puede tomar mas que dos partidos: trabajar o prostituirse. A no me gusta trabajar y soy demasiado burguesa para dedicarme a cortesana. ¡Por eso me he lanzado al comercio...! BEAUVALLON. ¡Y has entrado en casa de la Ninon de Lenclos...!

Pero luego, al verse junto á él, reaparecía la pequeña burguesa, celosa de su reputación, fiel á las enseñanzas de su madre.

Ella era varonil y corría con todos los trabajos de la casa, como una buena burguesa más pródiga en voluntad que en habilidades.

EL CONDE. , Astolfo, hay que ser económicos. Seamos como aquella burguesa prudente que, después de casar a su hija, se nutrió durante medio año con los restos del festín nupcial. Escatima cada pedazo, pésalo, calcúlalo. Si se cubre de moho, corta la parte superior; a pesar de eso, lo comeremos muy a gusto.

Verdad que todos estamos condenados a morir, y no es chico mal la muerte, sobre todo cuando se la contempla desde la cumbre de la vida, en el pleno goce de la mocedad y del brío sano de nuestra primavera; pero en circunstancias normales, en la vida burguesa, ordenada y política que hoy se vive, es difícil, cuando no imposible, que aparezca o se en cualquier sujeto un caso de heroísmo, de sufrimiento extraordinario, de entereza sublime o de otra virtud magna y pasmosa, sin que aparezca o se , como motivo u ocasión, en otro sujeto o en varios, un caso de vicio o de maldad o de fiereza no menos fuera de todo término razonable.

Mi alma burguesa estaría más conforme con una dicha más tranquila y menos ilusoria... Un marido que me hiciera feliz es todo lo que yo pediría. Y bien, el señor Baurepois... Temo que me aburriría mortalmente. Trate usted de gustar a una muchacha... murmuró la abuela con una desesperación que hubiera sido cómica a no ser tan sincera.

ERNESTO. ¡Usted también dice «¡Ah..., ah...!» Lysiane estaba al corriente de este detalle y me había manifestado que carecía de importancia. Mi futuro suegro no tenía la manga tan ancha; cuando ayer tuve que confesarle la irregularidad de mi nacimiento, se contristó. «¡Qué gran contrariedad, amigo mío...! Nosotros pertenecemos a una familia burguesa último refugio de los más arcaicos principios.

Palabra del Dia

pacificadoras

Otros Mirando