Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !
Actualizado: 23 de mayo de 2025
¡Pero, si usted se fue a conversar con don Melchor!... Le digo por broma, Baldomero; si yo prefiero la leche. ¿Y al fin?... ¿Nos vamos a pasar aquí la mañana? ¡Cuando quieran!... ¿Van a ir a caballo? preguntó Melchor. Si hemos de ir hasta lo de Anastasio, prefiero el coche. No, Lorenzo, iremos otro día; vamos a dar una vuelta por el campo, no más.
Aquellas verdes ramas, el humo y la plegaria que no se oían más que en Navidad, y hasta el Credo de San Anastasio que sólo se distinguía de los otros en que era más largo y tenía virtud excepcional, puesto que no se le leía más que en ciertas ocasiones producían un vago sentimiento de que algo grande y misterioso se había realizado para ellos allá en el cielo, y aquí abajo en la tierra, algo que se apropiaba con su presencia.
Es que bebe... tal vez algún «peludo»... por otra parte Anastasio es un hombre de muy mal carácter y como te decía el otro día, ha tomado a Ramona para tener quien le lave y le cocine; pero no le tiene ni el más mínimo cariño. ¿
»En ese momento, Juancito, que se había bajado ya, montó de un salto y acercándoseme, me dijo: «Vamos, don Ricardo, no le conteste»; pero yo le dije: «No me insulte, Anastasio, porque le puede costar caro». Al oír esto, se entró rápidamente y volvió a salir, poniéndose el cuchillo en la cintura y con un amador en la mano, diciéndome: » Caro me lo van a pagar ustedes y al mismo tiempo gritaba hacia el interior: ¡Enfréname el bayo!
¿Dónde?... viejo... preguntó asombrada Ramona, sin obtener contestación. Arrímese, Anastasio insistió Baldomero, mire que vale más llegar a tiempo que andar rondando un año. Así... dicen... contestó Anastasio, sin moverse de su sitio y castigando al suelo con la punta de su lonja.
¡Yo necesitaría toda la del mundo para mover una pierna!... ¡ay!... Después les va a pesar... ¡vamos!... ¡un poco de energía y arriba!... Vean que esos dolores perduran mucho si se les anda con paños tibios... ¡Vamos, pues, arriba!... Montamos a a caballo... ¡Ay!... ¡Ay!... ...y nos vamos de un galope... ¡Ay!... ¡Ay!... ...hasta lo de Anastasio. Todo fue inútil.
Yo preferiría que nos ensayáramos de a poco. Vayan ustedes en el break; yo iré a caballo. ¡Eso es! Y así podremos alternar... un poco en tu caballo... y otro en coche. Si quieren dijo Baldomero hay caballos muy mansos y de lindo andar... bueno, que para ir hasta lo de Anastasio es lejos, agregó recapacitando. ¡Y usted hablaba de «corrernos» hasta el pueblo!
¡Sí, hombre!, te acompañará Juancito... y llevará el «tostado» ¡que es de «anca»!... por si hay que traer a la «Pampita». Te ha dado fuerte con la «Pampita»... ¡Más fuerte te ha dado a ti! ¿Y qué camino debemos tomar, Baldomero, para evitar un nuevo encuentro con Anastasio? Juancito le dirá, don Ricardo; pueden pasar por el campo de los Gómez, ¿sabe don Melchor? que no es una vuelta grande.
Y he venido porque he sabido que Anastasio la maltrata... El hombre es bueno, pero tiene mal genio, sí, señor. ...y un hombre así no la merece... Que varias veces la ha echado de aquí... Así es, sí, señor... ...y yo he venido para decirle que cuando quiera se puede ir a casa... allí tendrá algún trabajito liviano... y podrá vivir respetada... ...¡Siempre tan bueno, don Melchor!
Palabra del Dia
Otros Mirando