Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !
Actualizado: 21 de junio de 2025
Aquel recorre todos los días a una misma hora todas las fondas: aparenta buscar a alguien: en efecto, algo busca; ya lo encontró; allí hay conocidos suyos: a ellos derecho: primera frase suya: ¡Hombre! ¿Ustedes por aquí? Coma usted con nosotros le responden. Excúsase al principio; pero si había de comer solo... un amigo a quien esperaba no viene. Vaya comeré con ustedes dice por fin y se sienta.
¡Gracias a Dios que encuentro alguien de mi opinión! exclamó la abuela triunfante. Sí, confieso que estas cuestiones nuevas me confunden un poco y trastornan también mi estudio... Tenemos menos contratos de matrimonio y, sobre todo, menos buenos contratos... Es muy deplorable... Sé que habitamos en un clima templado y que éstos son especiales para las solteras...
Otras veces se incorporaba lentamente, con gruñidos de vigilante hostilidad. Alguien pasaba por cerca de la alquería; una sombra, un hombre caminando de prisa, con la celeridad de los ibicencos, habituados a ir rápidamente de un lado a otro de la isla. Si la sombra hablaba, contestaban todos a su saludo.
Posible es que alguien piense en tal cual región de esta Península de la misma manera que pensaban los cubanos. Nobilísimo es el amor de la patria chica; pero debe ir acompañado, para no ser funesto, del amor de la patria grande. El desdén y el odio hacia ella son origen de debilidad y de interesado egoísmo.
Pampa hacía sonar, con fruición, en el bolsillo de su vestido de lana nuevo, los centavos que le diera el patrón para la rifa, cuando alguien la llamó. ¡Pampa! que tienes que lavar las medias del niño, y traer azúcar del almacén y limpiar el espejo de la sala, que está perdido de moscas. Y vuelta al trajín, sin una queja, encerrada en su mutismo de salvaje, no desbastada aún.
Alguien decía que llevaba su coquetería, su amabilidad demasiado lejos y que, no era tan fiel esposa como diligente mujer de su casa; como quiera que fuese, es lo cierto que tan maliciosos dichos no llegaron nunca a quebrantar la confianza del señor Princetot.
El viento acariciaba su barba entrecana. Una vez se le acercó lentamente Petrov y le preguntó con voz queda: ¿Hay alguien detrás de la puerta? ¿Quién es?... ¡Es necesario que la abran! ¡Qué tontería! ¿Y si entra cuando usted la abre? Es necesario que la abran. ¿Cómo se llama usted? No lo sé.
Cada cinco minutos alguien tomaba bruscamente la palabra y hablaba como quien cumple una faena obligatoria. Los demás asentían con la cabeza misteriosamente, pero bien veía yo que los que escuchaban no sabían lo que oían, lo mismo que el que hablaba no sabía lo que decía. Marta no se había presentado.
36 Porque antes de estos días se levantó Teudas, diciendo que era alguien; al que se agregó un número de hombres como cuatrocientos, el cual fue muerto; y todos los que le creyeron fueron dispersos, y reducidos a nada. 37 Después de éste, se levantó Judas el galileo en los días del empadronamiento, y llevó mucho pueblo tras sí.
Algunas veces, al ver que las letras danzaban ante sus ojos y su cabeza parecía rodar, como si repeliese toda idea, sentía deseos de lucha, feroces anhelos de herir a alguien.
Palabra del Dia
Otros Mirando