Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !
Actualizado: 20 de mayo de 2025
A este loco respetable bajé a ver para hacerle entender las órdenes de mi señor, y para atravesar prontamente tan obscuras mansiones, hice encender trescientas hachas, y por no encontrar éstas tan a punto, mandé prender fuego a las tocas y vestidos de cincuenta cautivos, y echarlos por delante de mí para alumbrarme el camino.
Pero dadme, señora, la mano, que yo no quiero otra seguridad mayor que la de mi continencia y recato, y la que ofrecen esas reverendísimas tocas. Y, diciendo esto, besó su derecha mano, y le asió de la suya, que ella le dio con las mesmas ceremonias.
Aresti, influenciado por este ambiente, pensaba en los místicos retiros de la Flandes católica, en sus conventos modernos de escrupulosa limpieza y sus beguinas cubiertas por tocas nítidas, de movibles alas, como mariposas de nieve. Goicochea seguía hablando.
De sus paños y tocas las banderas Al aire desplegaban á menudo: Las mismas que salian las primeras Tornaban á salir, y nunca pudo El Ingles entender estas quimeras; Que guarda Dios, si quiere, sin escudo, Y donde él no envía sus favores, Enbalde son humanos guardadores.
Con Fortunata volvió a intimar después de la escena violenta que he descrito, y juntas echaron largos párrafos en la cocina, mientras pelaban patatas o fregaban los peroles y cazuelas. Allí gozaban de cierta libertad, y estaban sin tocas y en traje de mecánica como las criadas de cualquier casa.
Cuanto la licencia alargas, La obligación disimulas. Señor, en dueñas y en mulas Están bien las tocas largas. Mucha honestidad promete, 505 Y es decoro justo y santo. Una viuda con un manto Es obispo con roquete. Fuera de esto, aquel estar Siempre en una misma acción 510 No mueve la inclinación Que el traje suele obligar. Ver siempre de una manera Á una mujer es cansarse.
Si la hubiera contentado el claustro, hubiérase entendido que el santo amor de Dios no dejaba en su corazón lugar para el amor al hombre; pero tampoco era esto, porque una tía monja que tenía en las del Espíritu-Santo quiso llevársela consigo, a lo que ella no se acomodó, diciendo que Dios no la había hecha para que la sofocasen tocas ni monjiles, ni para enojarse entre cuatro paredes.
Capítulo XXVII. De cómo salieron con su intención el cura y el barbero, con otras cosas dignas de que se cuenten en esta grande historia No le pareció mal al barbero la invención del cura, sino tan bien, que luego la pusieron por obra. Pidiéronle a la ventera una saya y unas tocas, dejándole en prendas una sotana nueva del cura.
No ha tenido más hijos, porque se ha quedado viuda. Y ahora que no tiene obligación de ponerse vistosa y elegante, sí que ha soltado la rienda a su modestia. Lo primero que ha hecho es vestirse con un hábito de viuda, es decir, con un manto de paño negro común y unas tocas blancas gruesas. Luego se ha venido a Torrijos y aquí ha vivido recogida durante treinta años.
Y al decir esto, el Sentido enarbóló la t, y dándole un garrotazo con ella á su escudero, le dejó tan mal parado, que tuvieron que ponerle un vendaje en la o, y bizmarle las costillas de la m porque se iba desangrando por allí á toda prisa. «Haya paz, señores dijo un Sustantivo Femenino llamado Filosofía, que con dueñescas tocas blancas apareció entre el tumulto.
Palabra del Dia
Otros Mirando