Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !
Actualizado: 2 de junio de 2025
Los pájaros turbaban el silencio monástico de aquellos campos, revoloteando en torno de los árboles frutales. Un seglar iba con un libro en la mano por el mismo camino que seguían ellos. Era la única persona que paseaba por la huerta. Aresti lo vió de espaldas y aceleró el paso como sí le acometiese de pronto una duda y quisiera salir de ella.
Los días de labor no paseaban por él más que algunos clérigos con sus largos manteos negros y enorme sombrero de teja, llevando algún seglar enmedio, dos o tres pandillas de indianos disputando en voz alta sobre el precio de los cambios o el valor de los solares de la calle de Mauregato, recién abierta, y tal cual valetudinario, que venía a primera hora a tomar el sol, y se retiraba tosiendo en cuanto sentía la humedad de la tarde. ¿Y las damas?... ¡Ah!
Agustín Cortés de Alfonso, alias formatge, negociante de oficio; natural y vecino de esta Ciudad, reconciliado por este Santo Oficio el año pasado de 1679, ausente fugitivo; salió al Auto en estátua con insignias de relajado y leída su sentencia con méritos fue relajado a la Justicia y brazo seglar, con confiscación de bienes por hereje, apóstata, judaizante, relapso, convicto, contumaz e impenitente.
Eran un clérigo que parecía seglar y un seglar que parecía clérigo; mal afeitados los dos, peor el sacerdote, que mostraba el rostro lleno de púas negras ásperas; vestían ambos de paisano, pero como los curas de aldea; el alzacuello del clérigo era blanco y estaba manchado con vino tinto y sudor grasiento; el cuello de la camisa del otro parecía también un alzacuello; usaba corbatín negro abrochado en el cogote.
Llegó á Buenos Aires el año de 1674, habiéndose portado en toda la navegación con grande ejemplo y edificación; y fué tal el que dió de su porte religioso en aquel puerto, que he oído á un sujeto, que ahora es de la Compañía y entonces era seglar, que no se cansaba de mirarle cuando salía fuera del colegio y se iba tras él sin acabar de admirar su silencio, recogimiento y compostura exterior y una modesta alegría que manifestaba en su rostro el espíritu del Señor, de que estaba lleno su corazón.
En los versos a la poetisa peruana Amarilis dice así: "Dejé las galas que seglar vestía; ordenéme, Amarilis; que importaba el ordenarme a la desorden mía." Pronto sabremos lo que había de durar aquel orden en Lope. Trasládase a Toledo, en marzo de aquel año, y, por su correspondencia con el Duque, podemos seguir los preliminares, no sobrado místicos, de su dedicación eclesiástica.
Magdalena Forteza, mujer de Gabriel Piña alias cap de olleta, de oficio vendedor de trigo en la cuartera; natural y vecina de esta Ciudad, de edad de setenta y tres años, reconciliada y presa segunda vez por judaizante, relapsa: salió al Auto como la antecedente: leyósele su sentencia con méritos y fue relajada al brazo seglar, con confiscación de bienes por hereje, apóstata, judaizante, relapsa, convicta, impenitente, negativa.
Isabel Martí, mujer de Bartolomé Terongí, alias el Conde, mercante de oficio; natural y vecina de esta Ciudad, de edad de cuarenta y dos años, reconciliada y presa segunda vez por judaizante relapsa; leyósele su sentencia con méritos y fue relajada a la justicia y brazo seglar, con confiscación de bienes por hereje, apóstata, judaizante, relapsa, convicta y confesa.
Siguieron las referidas censuras con invocacion del brazo seglar contra el cabildo, y viendo no poderlo conseguir se quejaron de él ante S. M., quien declaró por nulas dichas sentencias.
Porque en un malvado de gran talento todos piensan, de un malvado necio nadie se acuerda; porque forman un vivo contraste la iniquidad y el gran saber, y este contraste hace mas notable el extremo feo; por la misma razon que se repara mas en la relajacion de un sacerdote que en la de un seglar.
Palabra del Dia
Otros Mirando