Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !
Actualizado: 7 de junio de 2025
Vicente consiguió también ejercer poderosa influencia en ella, particularmente en lo que tocaba al orden y la etiqueta: los criados considerábanle como su jefe inmediato, y hacia él volvían los ojos siempre que iba a hacerse algo que no fuese la rutina de todos los días. Doña Martina a cada instante le preguntaba: Vicente, ¿dónde colocamos a Romillo?
Todavía no sabéis vivir en España los hombres del «gran mundo»; tomáis ciertas cosas demasiado a pechos, y hay en vosotros exceso de rutina. Te equivocas; nosotros sabríamos vivir al pelo, como los más listos de allá fuera; lo que hay es que nos falta teatro para tantos vicios como tenemos.
Y luego que consiguiera el título, ¿qué iba a hacer?... El pesimismo se había apoderado de Maltrana. ¿Para qué doctorarse? El estudio no significaba sabiduría, sino rutina. El había visto mucho y sabía a qué atenerse. La Universidad era una mentira, como todas las instituciones sociales.
Lejos de eso, se sigue la rutina mandando milicias numerosas, que avanzan al frente; empiezan a mirar a Facundo; cada soldado teme encontrarse con su lanza, y cuando oye el grito de ¡a la carga!, se queda clavado en el suelo, retrocede, lo cargan a su vez, retrocede y envuelve las mejores tropas.
Mucho confiaba en su criterio y en su autoridad para imponerlo á los pilotos, pues lo mismo que él podían apreciar la velocidad de las carabelas por rutina, y mejor debían de conocer las propiedades de barcos de su pertenencia en que antes habrían navegado.
Cada acción tiene un punto de vista desde el cual debe juzgársela, lo cual prueba la gran variedad de las perspectivas del alma humana... ISIDORA. Yo siento algún remordimiento... JOAQUÍN. Porque no has hecho un análisis frío del hecho en sí y te dejas llevar de la rutina. JOAQUÍN. La besé mil veces, y aun creo que se me escapó una lágrima, cosa en mí desusada.
La redacción del Faro creía que «había sonado la hora de romper definitivamente con las doctrinas del pasado». Sarrió deseaba con afán emanciparse de la rutina y de las ideas mezquinas, «romper los moldes estrechos en que yacía aprisionado» y «entrar de lleno en el dominio de su propia conciencia y de sus derechos». «Hacemos votos decía el articulista por que la aparición de nuestro periódico coincida con un período de actividad moral y material, y podamos asistir a una de esas transformaciones sociales que forman época en los anales de los pueblos.
Sagaz en sus investigaciones, y exento del espíritu de rutina que prevalecía en su época, descubre con una severa imparcialidad todos los defectos del nuevo gobierno económico, introducido por España en los pueblos de Misiones, y propone otro en que no supo evitarlos, substituyendo al sistema de comunidad, que formaba la base del régimen Jesuítico, el de factoría, que sólo difiere en el nombre.
Lo que fué inspiración, ahora es rutina; las figuras se desdibujan, el interés se apaga..., y al pobre autor, desconcertado, incapaz de recobrar la tensión nerviosa en que se hallaba al escribir su obra, le parece que nada de aquello que oye decir, es suyo.
Nosotros, marinos viejos, marinos galantes, la celebrábamos de reina y no la admiramos de esclava. Seguramente, no; el mar entonces no era tan bueno como hoy, ni tan pacífico; pero sí más hermoso, más pintoresco, un poco más joven. La belleza del mundo y del mar dependía en gran parte de su rutina y de su inmovilidad.
Palabra del Dia
Otros Mirando