Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !
Actualizado: 9 de julio de 2025
¿No ha entrado aquí hace un momento Bartolo el de la tía Jeroma? Martinán, dando prueba brillante de diplomacia y corazón, le respondió: Sí; acaba de entrar, pero ha salido sin detenerse por la otra puerta y se ha metido en la pomarada. Firmo quiso seguirle. Martinán le dijo: Es inútil que le busques. La pomarada está más oscura que una cueva y tú no la conoces como él.
La Gorgheggi dijo: Bonis, siempre fuiste un imbécil. Tu hijo... no es tu hijo. ¡Serafina! Y no pudo decir más el pobre Bonis. También él perdía la voz. Lo que hizo fue apoyarse en el altar de la capilla oscura, para no caerse. Como él no hablaba, Serafina tuvo valor para añadir: Pero, hombre; todo el mundo lo sabe... ¿No sabes tú de quién es tu hijo? ¡Mi hijo!... ¿De quién es mi hijo?
Y por lo que toca a su negra, que dicen honra, tomaba una paja, de las que aun asaz no había en casa, y salía a la puerta escarbando los dientes, que nada entre sí tenían, quejándose todavía de aquel mal solar, diciendo: "Malo está de ver, que la desdicha desta vivienda lo hace. Como ves, es lóbrega, triste, oscura. Mientras aquí estuviéremos, hemos de padecer.
A veces una frase de Julio parecía, sin embargo, buscar la intimidad y la confianza; algo invisible la impulsaba entonces, más que nunca, a burlar la adivinada intención. Burlarle aunque tal victoria le costase la felicidad de su vida. Y no se explicaba a sí misma la razón oscura de este deseo. Porque sufría al pensar que él pudiera sufrir.
Pero todo lo doy por bien empleado porque al cabo logré ver á la gracia de Dios. Vaya, vaya, déjeme usted en paz que tengo prisa. Pero no se movía. Plantada en medio de la plazoleta, con el cuerpo entornado por la cojera tanto como por el peso de la vasija, estirado el cuello rugoso y la oscura boca abierta para sonreir, parecía aquella mujer un endriago.
Sin embargo, el contraste de aquella cortina oscura con la blancura de paloma del pueblo la hacía grata a los ojos y poética. En suave declive, por una carretera trazada al intento, bajamos al manantial que sale en el centro mismo del río Guadalquivir, el cual viene ciñendo la falda de la sierra. Hay una galería o puente que conduce de la orilla al manantial.
Y si esa esperanza de orgullo y de poderío me fuera ofrecida ahora acompañada de un dolor semejante al que experimento, no quisiera revivir esa hora brillante. Porque bajo su ala llevaba una oscura mezcla y mientras volaba, dejaba caer una esencia todopoderosa para consumir un alma que tan bien la conocía.
A medida que la diligencia va subiendo las faldas de la serranía, el paisaje toma un aspecto mas y mas severo, melancólico y desolado. Donde quiera lomas escarpadas, sin vegetacion ninguna, enormes peñascos graniticos, de tinta oscura, campos desiertos y sumamente accidentados, ausencia de poblacion, de cultivo y de vida.
Marineda, la Nautilia de los romanos, se envolvía en una clámide de tinieblas. En breve comenzaron a distinguirse algunas luces que oscilaban sobre la masa oscura de la población, y presto se cubrió toda ella de puntos lucientes como estrellas de oro en un celaje sombrío.
¿Qué? me replicó el cazador. Y ya no pude dudar. Andrés dio algunos pasos hacia donde yo estaba. Le veía apenas aunque sobrepasaba casi con todo su cuerpo la oscura barranca.
Palabra del Dia
Otros Mirando