Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !
Actualizado: 13 de junio de 2025
En su choza de cañas, construida por él mismo, no hay nada que no sea obra de sus manos, desde la hamaca tejida con mimbres, y las tres piedras negras reunidas en forma de hogar, y los troncos de tamarisco dispuestos en forma de escabeles, hasta la llave y la cerradura de madera blanca con que se cierra esta extraña habitación. Este guarda es por lo menos tan extraño como su residencia.
A cual indio le toma la hamaca, A cual el pellejuelo que tenia, A cual, si le replica, allí le saca La manta con que el triste se cubria. Al fin, en la pared no deja estaca, Que todo cuanto halla, destruia, Y no contento de esta tal destroza, Enojo dá al que tiene muger moza. El Juan Ortiz aquí se regalaba, Y no tengais temor, pues que le duela Saber como su gente lo pasaba.
Hacía días que había comprado entre otras fotografías obscenas la de una mujer desnuda meciéndose en una hamaca. Se le antojaba que la baronesa se parecía mucho a aquella mujer, y trataba de averiguar, por medio de un prolijo examen exterior, si interiormente guardaría la misma semejanza.
Estos indios que son, como ya dije, los mas industriosos de aquellas misiones, hacen unos tegidos de algodon muy finos y de muchísima estimacion en la república: las hamacas que fabrican no pueden ser de mejor calidad; pero tambien es verdad que exigen un trabajo asiduo, y que entre seis mugeres emplean uno ó dos meses en la fabricacion de una sola hamaca.
¿Quién va? pregunté. Soy yo, Allen. Vengo con Sam Cooper, el contramaestre, y con Tommy, que quieren hablar con el piloto. Esperad un momento. Desperté a Tristán, que se echó de la hamaca y que mandó abrir inmediatamente. Por lo que contó Old Sam, portugueses y holandeses, sintiendo renacer sus odios, se batían a palos y a cuchilladas en la cubierta.
Al día siguiente estaba allí la hamaca de Blanca colgada a la sombra de un quitasol, y Raúl se ofrecía alegremente a embadurnarse la cara de negro como el Nelusco de la Africana, para completar el programa. La verdad, no se atreve ya una a expresar el menor deseo suspiraba la buena señora encantada columpiándose con un gozo de niña mientras el conde la abanicaba gravemente con un marabú.
Es fastidioso que se te haya olvidado mi hamaca, hija mía. La hubiéramos instalado en la escalinata. Hubiera sido inútil, mamá respondió Liette sonriendo y mostrando una hamaca que se columpiaba en la cubierta de cristales. Estoy segura de que es una atención de ese querido don Raúl exclamó la criolla muy gozosa; sabe que no puedo pasarme sin ella.
Pero aquel dia, en que el calor fué extraordinario, habiéndose retirado Amestoz mas temprano se acostó en la hamaca mientras volvia su amigo. Cogióle el sueño, y Bolívar á su llegada, por no molestarle, ocupó la cama que estaba vacia. Este cambio casual le salvó la vida.
Yo me dedico bastante a visitar los enfermos, y en estas visitas, y en las veces que acompaño al Santísimo Sacramento cuando se les da por viático, nunca he visto ni a un solo enfermo desasosegado; siempre fijos en la hamaca o catre sobre un cuero, que es regularmente su cama, parecen difuntos, según la quietud con que se mantienen; sólo se conoce están vivos por el movimiento de los ojos, o por lo que responden cuando se les pregunta; así permanecen hasta que mueren o sanan.
Al toque de oración de San Jacinto se cierran todas las puertas y ventanas, y se apagan las luces, entonándose por los que se encuentran dentro de las casas el Ángelus; concluído este, cada cual vuelve á su conversación, su ocupación ó su paseo. Nosotros hicimos una frugal cena, y después de interrogar sobre la localidad al Gobernadorcillo, buscamos el reposo en las mallas de una hamaca de abacá.
Palabra del Dia
Otros Mirando