Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !

Actualizado: 25 de julio de 2025


La conocía palmo a palmo, por dentro y por fuera, por el alma y por el cuerpo, había escudriñado los rincones de las conciencias y los rincones de las casas. Lo que sentía en presencia de la heroica ciudad era gula; hacía su anatomía, no como el fisiólogo que sólo quiere estudiar, sino como el gastrónomo que busca los bocados apetitosos; no aplicaba el escalpelo sino el trinchante.

Partiendo de él, cree penetrar con planta segura en los misterios de la esencia infinita. ¡Ilusión! Este imperativo es un fantasma. Los filósofos materialistas han metido en él el escalpelo de su crítica y se ha visto que está hueco. Schopenhauer, el sutil pensador que hoy arrastra a la juventud, fuera del mundo fenomenal coloca la Voluntad, que es en su opinión la cosa en . ¿Por qué?

Es así que ni el escalpelo ni el microscopio habían tropezado jamás con el alma ni con un Ser Supremo; luego, etc. Esta inclinación al análisis despertó en su inteligencia poderosa una tendencia razonadora de tal precisión que ni el más pequeño argumento podía escaparse entre sus apretadas mallas.

Cuando el doctor no estaba allí, cogíamos uno de los brazos del muerto, y ¡zas!, nos pegábamos bofetadas unos a otros...». Isidora dio un grito. «Eres tonta... Pues si vieras lo que yo gozo cuando levanto un músculo con mi escalpelo, cuando me apodero de una entraña...». Isidora se levantó, echando a correr y metiéndose un dedo en cada oído. «Aguarda, ruiseñora, no hablaré más de esto».

Los años que siguen al 34 están demasiado cerca, nos tocan, nos codean, se familiarizan con nosotros. Los hombres de ellos casi se confunden con nuestros hombres. Son años a quienes no se puede disecar, porque algo vive en ellos que duele y salta al ser tocado con escalpelo. Aquí concluyen definitivamente estos.

Y digo montaraces, porque si vamos a meter el escalpelo en las más despejadas de horizontes y más abiertas al comercio de las ideas y al tufillo de la industria, sabe Dios lo que hallaríamos en sus fibras... ¿Le parece a usted poco preguntóme en conclusión , este verdadero tesoro entre otros semejantes bien fáciles de distinguir, para ser admirado por un hombre culto capaz de entusiasmarse con algo todavía? ¿Y no es trabajo bien honroso y muy entretenido el que procuran la conservación y hasta el fomento de esto que yo me he atrevido a llamar tesoro, a riesgo de que usted se ría de él y de mis candorosos idealismos?

He procurado olvidarme de que el autor era montañés, y entrañable y fidelísimo amigo mío desde que tengo uso de razón, y amigo de los de mi casa antes que yo naciera; y haciendo un esfuerzo, que me ha costado mucho, y que no pienso volver a repetir, he detenido mi impaciencia, que me llevaba a leer con el pensamiento antes que con los ojos las páginas de un libro, que más que libro parece fragmento de la realidad viva; y he tenido el valor de estarle aplicando por días y días eso que llaman el escalpelo de la crítica.

Los escépticos que comienzan por dudar de todo para hacer mas sólida su filosofía, se parecen á quien, curioso de observar y fijar con exactitud los fenómenos de la vida, se abriese sin piedad el pecho y aplicase el escalpelo á su corazon palpitante.

Menester es, si tales cuestiones han de tocarse sin escandalizar a las gentes, que por larga experiencia y profundo estudio sepa tocarlas el escritor con destreza y suavidad, como el cirujano y el dentista que manejan bien el escalpelo y el gatillo para rebanarnos un pedazo de carne o para sacarnos una muela sin inútil dolor y sin grave daño.

¿Que me cortaréis a ese trozo de piel? Sin duda. ¡Pero eso es espantoso, doctor! ¡desollarme vivo! ¡sacarme el pellejo a tiras! ¡eso es bárbaro, inhumano, propio de la Edad Media, digno sólo de Shiloock, el judío de Venecia! Lo de menos es la herida del brazo. Lo difícil es permanecer cosido a mismo por espacio de treinta días. A sólo me horroriza el corte del escalpelo.

Palabra del Dia

accidents

Otros Mirando