Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !

Actualizado: 30 de junio de 2025


Á la desnuda campiña parece que se la ve tiritar de frío; las chimeneas de la barriada lanzan á borbotones el humo que se lleva rápido el helado norte, dejando en cambio algunos copos de nieve.

Adquirió su poema formas concretas, ya no fue nebuloso; y en las tiendas de los israelitas, que ella bordó con franjas de colores, acamparon ejércitos de bravos marineros de Loreto, de pierna desnuda, musculosa y velluda, de gorro catalán, de rostro curtido, triste y bondadoso, barba espesa y rizada y ojos negros.

"Tome el asiento real, Y con ceremonia igual Honraremos su persona." Vélez, El rey en su imaginación, 908-910. Libre y graciosamente, volvió sobre el propio tema en uno de los sonetos de Tomé de Burguillos: "La que venció desnuda, agora armada..."

Ella misma rogó al abogado que permaneciese en la celda, como si de este modo quisiera aminorar la molestia de vestirse ante unos desconocidos. Ferragut adivinó la piedad y la admiración del maître al llegar á este pasaje de su carta. La había visto medio desnuda, preparando el último tocado de su existencia.

Y contemplaba con ojos extraviados aquella garganta desnuda, de tentadora nitidez, realzada por el rojo pañuelo; el pecho robusto, sobre cuya tersa morbidez descansaban sus violetas. Las dos hortelanas al ver a Rafael cambiaron una sonrisa maliciosa, un guiño significativo, y pasaron delante de la señora con el propósito marcado de no estorbarla con su presencia. Sigan ustedes dijo Leonora.

Por fin, un día, estando recosiendo el mejor vestido que le quedaba, indicó a su hermano tímidamente la necesidad de comprar tela para otro: Pepe, antes por explorar su ánimo que por oponerse a sus deseos, la dijo: Tendrás que armarte de paciencia: por ahora, es imposible complacerte el capricho. Es necesidad. Pues igual que si no lo fuera. Ya sabes cómo estamos... Saldré desnuda a la calle.

Y de paso se convencerá usted de la alegría que yo experimentaré al saber que no han de verla otra vez medio desnuda... y reflexione usted un poco sobre qué clase de sentimiento será el que me inspira para que yo piense todo esto.

Y arrojándose desnuda, sin miedo al frío, en una butaca, rompía a llorar, furiosa; a llorar sin lágrimas, como los niños mimados, y gritaba: «¡Yo no quiero! ¡Yo no puedo! ¡Yo no sirvo!».

Salía yo de una casa, pero como la hora era alta y la noche lóbrega y el barrio apartado, desnudé la daga... me previne... á los pocos pasos tropiezo, caigo, y me encuentro sobre un cuerpo humano, y con la justicia encima, que viéndome con la daga desnuda y sobre un difunto, me toma por un homicida, y me prende. Decidme, señor Francisco preguntó Cosme Aldaba , ¿llevábais vos la daga de punta?

Sorprendido y con el corazón lleno de amargura, se quedó Francisco un momento solo en la sala desnuda y vacía, escuchando el pesado andar y las risotadas de los campesinos que bajaban atropelladamente la escalera y percibiendo en medio de aquel ruido esas palabras dichas con burlona voz: «¡Muy bien! ¡Maltrecho y sin palabra, le ha dejado Simón a ese orgulloso parisiense

Palabra del Dia

malignas

Otros Mirando