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Actualizado: 6 de julio de 2025
Con éste, que era de su color y su sangre, mostrábase autoritaria la buena señora, obligándolo a correr detrás de Nélida. El doctor Zurita, arrellanado en un sillón, seguía con los ojos entornados las espirales de humo de su gran cigarro. Las damas de su familia hablaban con otras argentinas de las mesas inmediatas.
Una voz se elevó detrás de él, ruda, autoritaria, como si pretendiese cortar las dudas del auditorio. Era el Herr consejero el que hablaba. Joven, esas noticias las envían las primeras agencias de Alemania... Y Alemania no miente nunca. Después de esta afirmación le volvió la espalda, y ya no se vieron más.
En cambio, ¡la mirada autoritaria y cruel!... ¡la voz, que parecía un esquilón fúnebre al formular sus pavorosas recomendaciones!... El implacable director iba a poner las armas en sus manos dentro de breves momentos, pero antes dictó a uno y a otro los detalles del combate, para que no surgiesen errores.
Durante aquellos dos días, hallábase la joven muy cohibida delante de la que iba a ser su tía, porque esta no bajaba del trípode ni cesaba en sus correcciones; y rara vez abría la boca Fortunata sin que la otra dejara de advertirle algo, ya referente a la pronunciación, ya a la manera de conducirse, mostrándose siempre autoritaria, aunque con estudiada suavidad. «En los conventos decía , se corrigen muchos defectos; pero también se adquieren modales encogidos.
Mistress Augusta Haynes era una señora de gran estatura y no menos corpulencia, breve y autoritaria en sus palabras, y que contemplaba el deslizamiento de la vida á través de sus lentes, apreciando las personas y las cosas con la fijeza altiva del miope.
Ahí tienes el resultado de tu terquedad». Después de expresar su opinión autoritaria de esta manera, doña Lupe, viendo a su sobrino más tranquilo y como vencido del sopor, empezó a dar instrucciones a Fortunata sobre el gobierno de la casa. No aconsejaba, sino que disponía.
En esa carta le decía entre otras cosas: «¿Pero cómo ir al Cayo de mi propia voluntad como pedigüeño de fama que va a buscarse amigos, o como solicitante, cuando quien ha de ir en mí, es un hombre de sencillez y de ternura, que tiembla de pensar que sus hermanos pudieran caer en la política engañosa y autoritaria de las malas Repúblicas?
Nélida le hablaba con una expresión autoritaria.
Mas su hermana la siguió inmediatamente en la actitud más severa y autoritaria que puede nadie imaginarse, dispuesta a corregir aquel principio de rebelión, que con el tiempo podría traer funestas consecuencias. Oyose rumor de disputa, sobresaliendo la voz áspera, irritada, de Carmelita; luego aquella voz se fue dulcificando, haciéndose persuasiva, razonadora, reprendiendo con suavidad.
El oficinista seguía pensativo, con las cejas fruncidas, como si estuviese contemplando interiormente un espectáculo molesto para él. Veía una casita cerca de Buenos Aires, y en sus habitaciones, pobres y limpias, una mujer y varios niños. Pero esta visión no tardó en esfumarse, recobrando Moreno el mismo aire de seguridad autoritaria y vanidosa con que se había presentado al hacer su visita.
Palabra del Dia
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