Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !

Actualizado: 1 de junio de 2025


Ignoraba si su fin había sido instantáneo, fulminante, saliendo del mundo con una sonrisa de inconsciencia, ó si había pasado largas horas de suplicio abandonado en el campo, retorciéndose como un reptil, rodando por los círculos de un dolor infernal antes de sumirse en la nada.

En las estrechas calles, distribuídas en todas direcciones, cortándose, retorciéndose de un modo caprichoso, hervía la muchedumbre con inquieto oleaje, bañándose en un gozo vivo y espontáneo.

Ella, tan pudorosa y tímida, mostraba en su agitación los mayores secretos de su desnudez, olvidada de todo, retorciéndose los brazos, llevándose las manos a la cabeza. «Habían matado a don Jaime: se lo anunciaba el corazón.» Y temblaba con el eco lejano de nuevos disparos. «Un verdadero rosario de tiros», según decía el Capellanet, había contestado a las dos primeras detonaciones.

El numeroso grupo que éstos formaban se había apartado del pedrero, dejando solos junto á él á dos hombres encargados de dispararlo. El de la gorra roja se inclinó para apuntar, abrió los brazos y cayó de bruces con una flecha clavada en el costado. Casi en el mismo instante recibió el otro pirata un dardo en la garganta y otro en una pierna y quedó retorciéndose sobre cubierta.

Luego, con movimiento rápido, el loco separó los obstáculos de la entrada; el aire glacial penetró por la bóveda y los vapores se esparcieron en el cielo inmenso, retorciéndose y escapándose por encima de la peña, como si los muertos de aquel día y los de los pasados siglos hubiesen vuelto a comenzar en otras esferas el combate eterno.

Señor mío dijo el alférez, retorciéndose su mostacho , yo soy un hombre que lo tomo todo con mucha calma, que antes de tirar de la espada, miro si hay motivo para ello, y que antes de ofenderme de las palabras de otro hombre, procuro conocer en qué estado se halla al decirlas. Vos estáis irritado, no si con razón ó sin ella.

Ella estaba junto a los cristales, me veía, me saludaba y cerraba las maderas del balcón de su cuarto. Yo necesitaba estar solo para saborear mi felicidad, y en vez de ir al casino o a mi casa, me marchaba al Rompeolas, me sentaba en el pretil con las piernas para afuera y miraba el mar a la luz de la luna o a la luz de las estrellas, retorciéndose en torbellinos furiosos.

Pos él, señor don Marcelo me dijo la infeliz retorciéndose las manos entrelazadas y con el espanto en los ojos, como si tuviera al hombre aquél delante de ellos ; el propiu causanti de mis penas sin consuelo; ¡el mal padre de la hija infeliz de las mis entrañas! Pero ¿está usted segura de que era él? pregunté a Facia fingiendo unas dudas y un asombro que no sentía.

Necesité mucho tiempo para descifrar tan sólo el título: leía Ifigenia. Entonces, con un brusco movimiento de espanto, arrojé el libro lejos de , a un rincón, como si hubiera tenido en mi mano un carbón encendido. Al anochecer los dolores de Marta parecieron acentuarse. Repetidas veces lanzó un grito estridente, retorciéndose en convulsiones.

Cuando María Antonia se vio libre de la presencia de D. Jacinto, quedó inmóvil y de pie por algunos instantes: rompió luego en insana risa y en descompuesta y nerviosa carcajada; y por último, se arrojó al suelo, retorciéndose, derramando un mar de lágrimas y balbuceando entre dientes el yo, pecadora. De allí en adelante no volvió a pecar María Antonia, ni en pensamiento ni en acto.

Palabra del Dia

aconséjele

Otros Mirando